martes, 6 de abril de 2010

A cuentas claras...

Por: Raúl Brugés Fuentes
Director de la Casa de la Cultura de Maicao

El pasado sábado 27 de marzo, llegaron a cumplir agenda con el señor Alcalde, doctor OSCAR MEJIA MARULANDA, dos delegados del Ministerio de Cultura, a saber, PEDRO VERBEL, promotor Regional de Cultura y EMMANUEL PICHON MORA, asesor del Plan Nacional de Música para la Convivencia, con el objetivo único de concertar las acciones a seguir por parte de la Administración, en lo referente al cumplimiento de políticas culturales nacionales, enmarcadas en los lineamientos que en tal sentido contemplan la Ley General de Cultura y las normas vigentes en la materia.

Haciendo uso de su sensibilidad hacia el tema, al igual que de su disposición para que el municipio avance en serio en Cultura, el alcalde aceptó los planteamientos de los asesores del Ministerio, relacionados con aspectos tales como el fortalecimiento institucional de la Casa de la Cultura, incluyendo la infraestructura física; creación de la escuela de música y artes del municipio; reestructuración y puesta en marcha del consejo municipal de cultura; creación de centros de memoria; fortalecimiento de la Biblioteca Municipal; rescate del patrimonio histórico y cultural, tangible e intangible del municipio, siendo una de las estrategias el proyecto “Casa museo Carlos Huertas Gómez”, entre otras iniciativas no menos importantes, en la cuales se incluyen los corregimientos.

En atención a que lo arriba expuesto exige un gran esfuerzo financiero, y considerando que los recursos para cultura son exiguos, el mandatario municipal consideró que deben reducirse algunos gastos para poder priorizar el cumplimiento del compromiso adquirido y decidió que una de las formas es la de manejar con austeridad dichos recursos.

Previo análisis real de la situación, es evidente que uno de los conceptos por los cuales más se desgasta el presupuesto ANUAL de cultura, es el de APOYO a eventos, asistencia a festivales, organización de festivales, reinados, fiestas patronales y comunales y otros, razón por la que se tomó la decisión de replantear este accionar.

La política apunta a priorizar los eventos que faciliten y dinamicen la promoción de las manifestaciones artísticas pero que involucren un componente formativo, lo que significa que no se NIEGA dicho apoyo sino que se priorizan los procesos...

Pero, oh sorpresa, el día lunes a través de una emisora local, sin tener un conocimiento REAL de lo planteado por el burgomaestre, sin que mediara por lo menos una consulta al documento que está disponible al público, un locutor hizo una serie de comentarios desacertados que han generado una serie de malos entendidos que apuntan a desdibujar la verdadera esencia de lo que DEBE hacerse, en procura de que el sector cultural del municipio armonice con las políticas culturales DE LEY y las exigencias del sector cultural.

Por supuesto, en esta irresponsable acción, se evidencia lo que a diario se debate en todos los rincones de Maicao, en referencia directa al “supuesto” evento que mas REPRESENTA a Maicao y su CULTURA, como lo es el Festival vallenato de la Frontera, evento del cual el locutor de marras forma parte activa como organizador y presentador, es indudable que median intereses muy particulares en el tema.

Sin que nos motive interés alguno en debatir si es o no CULTURALMENTE benéfico para Maicao este evento anual, es sano aclarar que, según la ley, LOS RECURSOS DEL ESTADO NO PUEDEN NI DEBEN DESTINARSE PARA LA FINANCIACION DE EVENTOS DE CARÁCTER PRIVADO, a lo que debe sumarse la triste e inocultable realidad de que este tipo de eventos le generan muy poco beneficio cultural a la población, entendiéndose que es necesario organizarlos, pero con alto valor agregado.

El Festival no privilegia lo formativo y lejos de generar una imagen positiva de Maicao, los participantes y músicos que asisten (el festival no atrae turistas), se van “hablando pestes” pues nunca se les paga los premios ni a tiempo ni completos, así como los honorarios a los músicos que no son cancelados conforme lo acordado.

En tal sentido, es conveniente reflexionar acerca de interrogantes que se plantean a continuación: ¿Existe un plan estratégico para que el festival incremente la actividad comercial de Maicao? Se ofrecen mesas o rondas de negocios? ¿Se invita a empresarios y/o inversionistas?

¿Se genera turismo? ¿Aparte de los conciertos, con artistas FORANEOS, existen otros espacios que generen ilustración, pedagogía o difusión folclórica? Se benefician los artistas locales? (estos participan sin recibir un solo peso por parte de los organizadores) ¿Se difunden los valores identatarios de Maicao y su cultura, que es tan rica y diversa? ¿Se invita a conferencistas de alto nivel para que se trascienda en el conocimiento de nuestro folclor?

¿Tiene, acaso, sentido que el municipio invierta 70 millones de pesos en el festival y el pueblo tenga que pagar, siendo la entrada más barata a $7000, como ocurrió el año anterior?. Con ese mismo dinero, cuántos niños no se hubieran formado en alguna área artística, cuántos artistas y gestores no hubiésemos cualificado, cuántos libros no habríamos adquirido para nuestra diezmada biblioteca......Hagamos el debate y saquemos cuentas de la relación costo-beneficio en términos culturales.

Por otro lado, en lo que tiene que ver con las festividades de barrio o patronales, se ha incurrido en el error de que estas solo “quedan buenas” cuando hay alto consumo de bebidas, cuando se invita (a altos costos) a artistas de renombre y cuando se queman millones de pesos en castillos, recursos que absurdamente debe aportar el municipio a través de Cultura, so pena de que los organizadores se dirijan a los medios a censurar al mandatario de turno, en los términos en que lo hizo el locutor aquel que citamos arriba..

Entonces, es conveniente reflexionar en este sentido. Maicao se encuentra a escasos años de cumplir el centenario de su fundación. Y en este momento histórico, contamos con un Alcalde visionario que desea cumplir unas elevadas metas de desarrollo, con base a un alto grado de compromiso con el futuro y con un profundo sentido gerencial. Un alcalde que conoce de primera mano que debemos iniciar un proceso de fortalecimiento institucional; que hay que crear la Escuela municipal de Música y artes, para que los jóvenes reciban una verdadera formación en este hermoso campo; que es necesario fortalecer la Biblioteca Municipal para formar niños y jóvenes competentes en la lectura y disfruten del sano y constructivo placer del libro; que necesitamos construir monumentos, museos, parques temáticos, cultura ciudadana, patrimonio cultural, identidad, en fin.

Finalmente, deseo dejar plasmado en este escrito un último interrogante. ¿Si es viable cumplir con tan ambicioso proyecto y noble propósito GASTANDO los recursos organizando parrandas monumentales (15 o 20 mil cajas de cervezas; 10 o más artistas famosos que no se gastan ni un peso en Maicao y que nunca mencionan nuestro pueblo en sus entrevistas y planes de giras) o por el contrario, apoyando al doctor OSCAR, nuestro alcalde que no es “OLIMPICO” pero que se las sabe todas??

1 comentario:

Anónimo dijo...

El artículo aporta indudablemente elementos válidos para el debate sobre la temática cultural en nuestro municipio.
Coincido plenamente en que el Festival debe generar todo un entorno mucho más rico para la divulagación de valores,debatir aspectos socio-culturales,la existencia de foros y espacios para "vender" a Maicao,en el mejor sentido de la palabra.
En cuanto a "priorizar" los aportes a las fiestas patronales,ahí sí me entra una gran interrogante.A criterio de quien son válidos unos eventos y no otros? Serán solamente válidos aquellos cuyos dirigentes tienen mayor identificación política con "Oscar"? Si se habla de cesar el aporte municipal a esos eventos debe ser A TODOS,sin excepción.Y la recuperación-restauración de la Casa de la Cultura algo tangible,que valga por las millonadas que se pretende ahorrar con el cese de las ayudas económicas a las comunas.

Analytic