El día más triste en mucho tiempo fue el sábado 8 de noviembre del año 2008: la tragedia legó al pueblo se paseó por sus calles, se vistió de muerte e irrumpió violentamente en una ciudad cuya historia ha estado salpicada, precisamente, de violencia.
Era un día soleado y los maicaeros disfrutaban de la tregua que les había dado el fuerte invierno de la última semana. De repente dos sicarios irrumpieron en una vivienda de cal carrera 17 con calle 5 en el barrio Santander en donde varias personas departían alegremente y sin decir una palabra dispararon sus vaciaron contra ellos sus poderosas y letales armas.
Como consecuencia del demencial ataque 4 personas murieron de manera instantánea y otras más resultaron gravemente heridas. De éstas últimas otras dos perdieron la vida en el Hospital San José unas horas después.
El frío boletín policial reveló los nombres de los infortunados ciudadanos y ciudadanas: Rafael Antonio Valdeblánquez Barros, de 24 años; Eider Manuel Barros Palmar, de 19; José David Mindiola Gámez, de 22 y los hermanos Carlos y Arturo Iguarán Acuña, de 28 y 29 años respectivamente.
Una mujer en estado de embarazo que respondía al nombre de María Mary Epiayu Ipuana murió luego de una cesárea de emergencia en el Hospital San José, de acuerdo con el parte médico el recién nacido se encuentra en óptimas condiciones de salud. Además resultaron heridos Laura Barros Ipuana, Xenia Zeneth Gómez Hernández y Charles Valdeblánquez.
Maicao ha vivido una violencia histórica
En sus 82 años de historia los maicaeros han debido convivir con la violencia. Violencia de unas familias contra otras; violencias de las bandas delincuenciales contra los ciudadanos honestos; violencia por el enfrentamiento de estas bandas entre sí; violencia por riñas encendidas por los efectos del alcohol; violencia de quienes por apoderarse de bienes ajenos atentan contra la integridad física de las víctimas…en fin, violencia de todo tipo que cobra su cuota en términos de muertos, heridos y miedo.
Era un día soleado y los maicaeros disfrutaban de la tregua que les había dado el fuerte invierno de la última semana. De repente dos sicarios irrumpieron en una vivienda de cal carrera 17 con calle 5 en el barrio Santander en donde varias personas departían alegremente y sin decir una palabra dispararon sus vaciaron contra ellos sus poderosas y letales armas.
Como consecuencia del demencial ataque 4 personas murieron de manera instantánea y otras más resultaron gravemente heridas. De éstas últimas otras dos perdieron la vida en el Hospital San José unas horas después.
El frío boletín policial reveló los nombres de los infortunados ciudadanos y ciudadanas: Rafael Antonio Valdeblánquez Barros, de 24 años; Eider Manuel Barros Palmar, de 19; José David Mindiola Gámez, de 22 y los hermanos Carlos y Arturo Iguarán Acuña, de 28 y 29 años respectivamente.
Una mujer en estado de embarazo que respondía al nombre de María Mary Epiayu Ipuana murió luego de una cesárea de emergencia en el Hospital San José, de acuerdo con el parte médico el recién nacido se encuentra en óptimas condiciones de salud. Además resultaron heridos Laura Barros Ipuana, Xenia Zeneth Gómez Hernández y Charles Valdeblánquez.
Maicao ha vivido una violencia histórica
En sus 82 años de historia los maicaeros han debido convivir con la violencia. Violencia de unas familias contra otras; violencias de las bandas delincuenciales contra los ciudadanos honestos; violencia por el enfrentamiento de estas bandas entre sí; violencia por riñas encendidas por los efectos del alcohol; violencia de quienes por apoderarse de bienes ajenos atentan contra la integridad física de las víctimas…en fin, violencia de todo tipo que cobra su cuota en términos de muertos, heridos y miedo.
La tétrica figura del sicario
La figura del sicario es relativamente nueva en el escenario de los hechos violentos en Maicao y, en general de La Guajira. Hasta hace cinco años los enfrentamientos, venganzas y otro tipo de hechos de sangre, eran protagonizados por quienes se consideraban con derecho a aplicar justicia por su propia cuenta. Ellos mismos, o sus familiares cercanos, ejecutaban la acción criminal.
En esos tiempos nadie “alquilaba” su pistola ni se dedicaba a matar por cuenta de otro y mucho menos por encargo o por contrato. Cuando alguien tenía problemas sabía de quién cuidarse: bastaba tener ciertas precauciones, conocer los carros en que se desplazaban sus rivales, evitar algunos lugares y estar pendientes de no encontrarse con ellos.
Hoy en día el enemigo puede ser cualquier joven o adulto, casi siempre un extraño a la región, en muchos casos joven y, la mayoría de veces andando a pie o en motocicleta. El sicario no conoce reglas ni las respeta. Y por eso ataca indiscriminadamente a los mayores, a los jóvenes y a las mujeres embarazadas. Para ellos matar y huir es lo normal. Después nadie volverá a saber de ellos hasta cuando vuelvan a aparecer de nuevo, con su embestida de muerte y terror, dispuestos siempre a apretar el gatillo sin piedad en nombre de quienes no se atreven a dar la cara.
No es la peor masacre de la historia de Maicao
La del 8 de noviembre es uno de los episodios más dolorosos y trágicos en los ochenta y dos años de historia de Maicao, pero no es la más grande masacre que se haya cometido en su territorio.
El hecho más pavoroso se produjo el 23 de marzo de 1.983 y es conocido como “La masacre de Carraipía”. Ocurrió en una madrugada cuando los miembros de dos familias fueron sacados de su casa en el barrio Rojas Pinilla y embarcados a la fuerza en un camión en donde los condujeron hacia un paraje ubicado en la salida al corregimiento de Carraipía.
Una vez en ese lugar sus captores los obligaron a descender y acto seguido dispararon contra el grupo en el que se encontraban hombres, mujeres, ancianos y niños.
En total se contaron 11 muertos: 4 mujeres, cuatro ancianos y tres niños. El milagro de la vida permitió que sobreviviera también un niño de once años.
La figura del sicario es relativamente nueva en el escenario de los hechos violentos en Maicao y, en general de La Guajira. Hasta hace cinco años los enfrentamientos, venganzas y otro tipo de hechos de sangre, eran protagonizados por quienes se consideraban con derecho a aplicar justicia por su propia cuenta. Ellos mismos, o sus familiares cercanos, ejecutaban la acción criminal.
En esos tiempos nadie “alquilaba” su pistola ni se dedicaba a matar por cuenta de otro y mucho menos por encargo o por contrato. Cuando alguien tenía problemas sabía de quién cuidarse: bastaba tener ciertas precauciones, conocer los carros en que se desplazaban sus rivales, evitar algunos lugares y estar pendientes de no encontrarse con ellos.
Hoy en día el enemigo puede ser cualquier joven o adulto, casi siempre un extraño a la región, en muchos casos joven y, la mayoría de veces andando a pie o en motocicleta. El sicario no conoce reglas ni las respeta. Y por eso ataca indiscriminadamente a los mayores, a los jóvenes y a las mujeres embarazadas. Para ellos matar y huir es lo normal. Después nadie volverá a saber de ellos hasta cuando vuelvan a aparecer de nuevo, con su embestida de muerte y terror, dispuestos siempre a apretar el gatillo sin piedad en nombre de quienes no se atreven a dar la cara.
No es la peor masacre de la historia de Maicao
La del 8 de noviembre es uno de los episodios más dolorosos y trágicos en los ochenta y dos años de historia de Maicao, pero no es la más grande masacre que se haya cometido en su territorio.
El hecho más pavoroso se produjo el 23 de marzo de 1.983 y es conocido como “La masacre de Carraipía”. Ocurrió en una madrugada cuando los miembros de dos familias fueron sacados de su casa en el barrio Rojas Pinilla y embarcados a la fuerza en un camión en donde los condujeron hacia un paraje ubicado en la salida al corregimiento de Carraipía.
Una vez en ese lugar sus captores los obligaron a descender y acto seguido dispararon contra el grupo en el que se encontraban hombres, mujeres, ancianos y niños.
En total se contaron 11 muertos: 4 mujeres, cuatro ancianos y tres niños. El milagro de la vida permitió que sobreviviera también un niño de once años.
Hubo mucho dolor, voces de repudio, miedo y llanto. La prensa nacional dio gran despliegue al hecho y Maicao saltó a la primera plana de los grandes periódicos, noticieros de televisión e informativos radiales.
Las emisoras locales también cubrieron el caso y sus noticias, como siempre terminaron con una frase que bien podría utilizarse al final de todas las noticias sangrientas de todos los tiempos: “las autoridades iniciaron una exhaustiva investigación…”
Santander: el barrio más mencionado de la últimas horas
El Santander es un barrio céntrico habitado por personas de estrato 2 y 3. Tiene el privilegio de estar cerca de todo: del mercado público, del Hospital San José, y del centro de la ciudad. La calle 8 lo conecta rápidamente con los barrios de oriente y occidente y la carrera 18 le permite conectarse con la Troncal del Caribe, principal vía de Maicao.
Hace tres décadas fue una zona en donde se presentaron varios hechos de violencia pero en los últimos años vivía una relativa tranquilidad la cual fue interrumpida por la tragedia del sábado.
Las emisoras locales también cubrieron el caso y sus noticias, como siempre terminaron con una frase que bien podría utilizarse al final de todas las noticias sangrientas de todos los tiempos: “las autoridades iniciaron una exhaustiva investigación…”
Santander: el barrio más mencionado de la últimas horas
El Santander es un barrio céntrico habitado por personas de estrato 2 y 3. Tiene el privilegio de estar cerca de todo: del mercado público, del Hospital San José, y del centro de la ciudad. La calle 8 lo conecta rápidamente con los barrios de oriente y occidente y la carrera 18 le permite conectarse con la Troncal del Caribe, principal vía de Maicao.
Hace tres décadas fue una zona en donde se presentaron varios hechos de violencia pero en los últimos años vivía una relativa tranquilidad la cual fue interrumpida por la tragedia del sábado.
6 comentarios:
En maicao nadie se muere de gratis o por equivocacion......
Como pueden decir que alguien no muere gratis o por equivocación, ojala mas nadie pase por un dolor tan grande, acaso con la vida de alguien se repone otra o dinero o cosas materiales? Por cualquiera que sean los motivos o la circunstancias la violencia no es buena, el decir esas palabras es señal de que se apoya o se aplaude el que se frustre una vida, el que se venga de algo o alguien es aun mas violento.
Yo en vez de decir que nadie muere gratis o por equivocación, le pido a Dios que tenga misericordia no solo por el pueblo maicaero si no por todo el mundo. Que bendiga este territorio, su sol y sus mares sus pequeños pueblos y sus grandes ciudades, que bendiga su gente a cada instante.
Si todos pensáramos positivamente no aceptando actos de barbarie, en Maicao no hubiese entrado el flagelo de la violencia. Unámonos más bien a una sola vez en pedir a Dios que disipe toda ola de muerte. Y acercarnos a El para que la violencia no nos arrebate nuestros seres queridos.
DIOS BENDIGA MI HERMOSO PUEBLO……. ¡MI MAICAO QUERIDO!
Estoy totalmente de acuerdo con el repudio de la muerte injusta, no soy de maicao, pero siento que debemos tener cuidado a la hora de hacer un comentario, en nuestro pais la mayoria de los muertos por ataques son personas inocentes,por que si estas personas tenia problemas estoy segura que no hubieran expuesto su vida en una parranda publica, por favor mas respeto por que no es justo que con palabras libres dejemos impune el dolor de otros.
MAICAO MI PUEBLO HERMOSO... NACI EN MAICAO PERO HOY EN DIA VIVO EN ESTADOS UNIDOS CON MI SEÑORA E HIJOS, TODA MI INFANCIA LA VIVI EN MI MAICAO CON MI FAMILIA; MIS PADRES Y HERMANOS. EN MI HOGAR CRECI ENTRE COMERCIO, SOL, Y ALEGRIA, TAMBIEN VIVIENDO EN CARNE PROPIA EL EGO DE AQUELLOS QUE SE CREEN MAS QUE OTROS POR TRES PESOS QUE TENGAS EN SUS BOLSILLOS, LAS PISTOLAS QUE CON ORGULLO LAS COLOCABAN EN LA PRETINA DE SUS PANTALONES, POBRECITOS QUE IGNORANTES. PERO AUN CON ESTOS INFORTUNIOS DEL AYER, LA CORRUPTA INSTITUCIONALIDAD Y FUERZA PUBLICA QUE AÑO TRAS AÑO DESANGRA MI CIUDAD HABLO DE ESA PORQUERIA LLAMADA DIAN, POLICIAS, DAS, CTI Y DEMAS ESTAMENTOS DE SEGURIDAD QUE NO SON MAS QUE DEMONIOS DISFRAZADOS DE ESTADO. ELLOS NO SON FELICES PORQUE DIOS LOS AZOTA Y LOS REPRENDE. NO HAY QUE ACEPTAR SUS ATROPELLOS DEFIENDE LO QUE ES TUYO.
DE ESTE MAICAO DEL HOY ME ENORGULLECE SER HIJO TENEMOS ESCRITORES COMO ALEJANDRO RUTTO, CANTANTES COMO FELIPE PELAEZ, PRODUCTORES COMO CARLOS HUERTAS JUNIOR, Y INCLUSO POR AHI ESCUCHE QUE ERA DE ACA DE MAICAO UN GRAN ESCRITOR EN POTENCIA DE TALLA NACIONAL INCLUSO INTERNACIONAL Y ES MUY JOVEN ESCRIBE CRECIMIENTO PERSONAL NO RECUERDO SU NOMBRE EN ESTE MOMENTO PERO ES EXCELENTE SU LITERATURA POR AHI LEI UNA DE SUS OBRAS INEDITAS Y DARA MUCHO DE QUE HABLAR POR SU TALENTO, AUTENTICIDAD Y RAICES PROPIAS DE ESTA TIERRA BENDITA.CREO QUE ES APELLIDO DUQUE SI MAL NO RECUERDO.
MAICAO DE MI CORAZON LE ORO A CRISTO CADA JORNADA POR TI BENDITO SEAS BENDICE A MI PUEBLO ELIMINA CON TU PODER LO MALO PARA QUE SE CONSERVE LO BUENO Y FLOREZCAS Y SE CONSERVE PARA SIEMPRE LA PAZ EN EL VIVIR DIARIO
TE AMO MI MAICAO
ATENTAMENTE
FEDERICO ABUCHAIBE
Que Dios tenga en su reino a todas las personas que murieron en maicao y a los que estan heridos que él señor los cubra con su manto y los alivie, por favor las personas que caresen de sentimientos que no hagan comentarios estupidos, soy chocoana no consco a maicao pero me duele lo que les pasa. " ESTOY CON USTEDES" LEONELA
Es muy triste que mi pueblo no haya cambiado,tanta violencia. GUAJIROS paisanos mios, por favor que pasa ?miremonos somos hermanos, somos paisanos. Acabemos con esta violencia que solo nos trae es ruina para nuestro hermoso pueblo. vivo hace muchos años en bucaramanga, hablo muy bien de mi pueblo ha todo el que conosco, por que mi pueblo es muy bello.Pero me da mucha tristeza cuando escucho de esas barbaries que cometen algunos hermanos nuestros matandonos unos ah losd otros ruego mucho ah dios que todo cambie en mi region que dios bendiga ah mi querida guajira y la ilumine siempre.
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