jueves, 10 de febrero de 2011

"La Vieja Mello": Electoralizada y etilizada

Por: Antonio Nicanor Escudero Fuentes

No soy un fanático, sectario y dogmatico religioso, obedezco mas a ser un creyente democrático que si bien busco respuestas en la fe, divino y sobrenatural muchas veces me apropio del conocimiento científico para encontrar respuestas a ciertos problemas sociales, económicos, políticos , culturales y ambientales que suceden en la ciudad.
Existe un problema en la comunidad fundamentalmente en el adulto mayor, una preocupación cada vez más, con ribetes mayúsculos en un sector significativo de los habitantes de Riohacha y de muchas personas que nos visitan anualmente los 02 de Febrero, día en que en la tradición oral se conoce como el día de La Vieja Mello otrora fiesta de la religiosidad y de la espiritualidad donde predominaba el reencuentro y la reconciliación familiar.

Hoy día es más un escenario donde la politiquería hace sus mejores acuerdos electorales con quienes aspiran a ser los gobernantes de turnos elegidos por elección popular y por otra parte convierten a la ciudad en un gran circo para ingerir todo tipo de bebidas alcohólicas y algunas otras sustancias alucinógenas.

Es imperativo recordar lo que aconteció por los años de 1663 cuando piratas que pretendían atacar a la ciudad desembarcaron en Camarones y cuando creían estar muy cerca del objetivo militar se encontraron con una tierra selvática y espesa y perdieron el norte. “Un lunes 14 de Mayo de 1663 cuando los piratas desembarcaron silenciosamente en la madrugada cerca de Camarones en varias piraguas. Y trataron de llegar por tierra a Rio Hacha. Pero al desembarcar al alba de ese día en vez de encontrar un lugar llano y extendido que conocían se hallaron frente a una selvática, montañas y serranías y no pudieron dar con el camino a la ciudad (Marco Tulio Annichiarico Robles. Fundación de Riohacha. Para otros Riohacheros en 1663 el mar iracundo, incontrolable e inatajable quiso tragarse a Riohacha y se llevo las tres primeras calles de la ciudad. “Mas en Rio Hacha también hay la tradición de una gran invasión ocurrida el 14 de Mayo de 1663, llevándose las tres primeras calles que le llamaban de “La Mar” o de “La Platería, estos dos sucesos que hacen parte de la oralidad histórica de Riohacha sugieren el grado de adoración que los habitantes de la ciudad expresaban a la “vieja mello”, hoy cuestionado por los hechos tozudos que riñen con la historia de la salvación. Desde entonces los Riohacheros y todos los habitantes de la ciudad honramos con fervor la imagen de la “Vieja Mello”. Es un día especial donde la espiritualidad y la religiosidad irrumpían en el escenario municipal, el aire que se respiraba era cercano a la divinidad por doquier se observaba una relación de los Riohacheros y Riohacheras con Dios.

En épocas pretéritas parecía que los principios del Vaticano II se materializaba y se dinamizaba en Riohacha el 02 de Febrero como en ninguna otra ciudad del urbe “El Concilio Vaticano II enseña que el hombre – con todo su entorno como individuo y como sociedad está llamado a un orden superior, a un fin más alto que es la comunión con Dios” (Antropología, Teología y Espiritualidad. Prof. Ciro García, OCD). Los antiguos 02 de Febrero, o el día de la Virgen de Los Remedios o de la “Vieja Mello” como orgullosamente decimos los Riohacheros raizales, todas sus calles y carreras servían para transitar desde cualquier punto a la catedral, todos los caminos de la ciudad conducían a la parroquia donde hombres y mujeres, niños, niñas y jóvenes parecían elevarse por encima del pavimento y se transformaban en sujetos bíblicos y religiosos en trance con lo divino, cuyo propósito no era otra cosa que tener un encuentro en la iglesia en plena comunión con Dios para poder reencontrarse y encontrarse consigo mismo y sus otros seres queridos. Eran momentos gloriosos donde todo parecía un andar hacia lo divino en comunión verdadera con el Padre, el Hijo y el Espíritu Santo.

Los tiempos presentes son muy distintos a la iglesia no se va a la plena comunión con Dios, Riohacheros y Riohacheras en su mayoría asisten para ver al ex presidente Álvaro Uribe Vélez y otras destacadas figuras de la politiquería y de la corrupción a nivel nacional en búsqueda no de la devoción sino de la votación para diseñar estrategias electorales y seguir gobernando al país a los departamentos y municipios no para invertir los recursos presupuestarios en la solución de las necesidades básicas de los pueblos sino para seguir enriqueciéndose a nivel personal y familiar.
Después de los actos religiosos entrecomillas, porque los de hoy son actos politiqueros y electoreros se inicia una maratónica carrera etílica y de otras sustancias prohibidas por la legislación nacional que ponen en riesgo no solamente la vida de inocentes transeúntes sino que está acabando con la fe y la religiosidad de los Riohacheros y Riohacheras y demás creyentes que ese día nos visitan. ¿Frente a esa nefasta realidad que dice la curia de Riohacha? ¿Qué dice el Obispo Héctor Salà Zuleta, líder de la comunidad católica que se congrega ese día para venerar a la “Vieja Mello”? No basta con escuchar la voz solicitante del abogado Álvaro Romero Effer para que regresemos a los viejos tiempos y a los viejos caminos. Es imperativo escuchar la voz del obispo de la diócesis.

Para los antiguos materialistas utópicos la religión estaba al lado de los burgueses y explotadores, será que los líderes católicas en Riohacha están unidos con los politiqueros nacionales, departamentales y municipales contribuyendo con esta alianza estratégica a que mueran las bacterias religiosas y espirituales de Riohacheros y Riohacheras para la “Vieja Mello”. Hoy es de carácter imperativo que reflexionemos acerca de la comunión con Dios al menos ese histórico día 02 de Febrero para recuperar la fe perdida. La comunidad riohachera está solicitando en altos decibeles que los líderes católicos de nuestra iglesia se pronuncie públicamente frente a esta nueva idolatría, de este refinado paganismo en moda: Convertir lo religioso en un acto politiquero y electoral. Hay eventos donde la verdad no surte buenos efectos pero no deja de ser verdad aunque quien la diga corra el riesgo de ser excomulgado, pero por la fe, la religiosidad y espiritualidad de un pueblo cualquier riesgo es insignificante. En los tiempos pasados cuando la pastoral Riohachera era liderada por religiosos de la talla espiritual de Eusebio Septimio Mari (Obispo 1952 – 1965), Livio Reginaldo Fishionni (Obispo 1966 – 1988) y los párrocos presbíteros Tarsicio Dimeo de Ripacorbaria, Carmelo Siori de Villalago, Máximo Bossi entre otros garantizaban al menos en ese día una forma de vivir y de sentir de Riohacheros y Riohacheras en una relación filial con Dios; hoy la situación es dramáticamente distinta y el acto gira en una relación directa con lo electoral, el ron, el aguardiente, el whisky y otras sustancias insanas para la salud humana y la fe. Sin lugar a equivoco estoy plenamente seguro que el tornado que hoy ha barnizado la fiesta de la “Vieja Mello” en aquellos tiempos no era posible y si esos líderes religiosos estuvieran entre nosotros la espiritualidad estuviera por encima de la politiquería y el carácter religioso de la fiesta no permitiría el uso y consumo de sustancias etílicas.

Los partidos, tradicionales y no tradicionales, la politiquería y la corrupción han tañido el espacio parroquial y han enrarecido de tal magnitud el ambiente religioso que anteriormente se vivía, en el presente no se logra ver las partículas salvíficas y de fe que produce la relación filial del hombre con Dios aunque utilizaremos los nuevos y potentes telescopios que utilizan los científicos modernos para observar las viejas y nuevas estrellas del universo. Es de carácter imperativo que todos los habitantes de Riohacha sin distingo de credo religioso recuperemos los viejos caminos, los viejos escenarios espirituales para que el histórico, glorioso y religioso 02 de Febrero vuelva a transitar hacia Dios como ser divino y de salvación; orientar intencionalmente que ese día elijamos a Dios como ser supremo muy por encima de gobernantes y politiqueros, para legitimar con nuestros sentimientos, emociones, pensamientos y acciones hacia una relación filial de tipo afectivo y amoroso con lo divino, con Dios. Esta es una responsabilidad de todos y un compromiso teologal del obispo y sacerdotes de la curia de Riohacha, para que este día se convierta en una circunstancia tempo- espacial trascendental y que todo los feligreses escuchen el llamado a la comunión con dios, para volver hacer hijo del padre.

RECUPEREMOS LA RELIGIOSIDAD PERDIDA

1 comentario:

Anónimo dijo...

NO SOY PARTIDARIO DE LAS CREENCIAS EN IMAGENES, SIN EMBARGO CONSIDERO OBSENO LO QUE LOS POLITICOS HACEN DE ESTA TRADICION.

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