Respuesta de Martín López G. al artículo "Mitios, vallenatos y marimberos como "estigmas" de Riohacha" escrito por el profesor Abel Medina Sierra
Por: Martín López González
Con todo el respeto le sugiero que no ponga en mi boca ni en mi pluma palabras que ni he dicho ni he escrito.
Si Ud. quiere le hago llegar mi tesis Cambios en los Procesos Académicos y Culturales Producto de la Bonanza Marimbera, donde en ninguna parte hablo de mitios, es más la historia de vida referenciada es la de Hernán Arredondo Arteche, un marimbero “citadino”.
La investigación no es sobre la música, en ella se demuestra el cambio del modelo social en la ciudad de Riohacha a partir del fenómeno conocido como bonanza marimbera. En mi tesis hablo de cambios en los gustos musicales, sin hablar despectivamente del vallenato. Cuando en algún ensayo hablo de música elaborado, me refiero al término técnico que utilizan los músicos, no a que el vallenato sea música inculta.
El ensayo ganador en el concurso Arte Ensayo de la Secretaria de Cultura y Turismo, Riohacha 460 años, Nos Cambiaron la Historia y nos Jodieron, hace referencia al cambio de modelo social de estudiante y deportista a marimbero, no a la música como Ud. dice que yo digo: la llegada de los mitios y los marimberos en los 70´s produjo un atraso cultural que “jodió” (sic) la sociedad riohachera e impuso la “estridente” e “inculta” música vallenata.
Si se quiere debatir seriamente sobre estas ideas, lo primero que hay que hacer es entender la propuesta global de lo que cada uno de nosotros ha investigado, sin sacar de contexto las cosas. Lo más importante de los que estamos al frente del Festival Internacional del Bolero, de la Fundación Cultural Raíces es que respetamos profundamente la música Vallenata, es más hacemos unidad de acción con la Fundación Cultura Guajira realizadora del Festival Francisco el Hombre.
Estimado profesor le agradezco infinitamente no me malinterprete pues estoy seguro de lo que he escrito y dicho, en mi discurso en el lanzamiento del libro Riohacha es un Bolero, en el Foro dije: ”Por eso fue fácil la alteración de los valores culturales propios de las décadas anteriores a los setenta, pues se puso la música de acordeón al servicio del hedonismo de los emergentes. Los grandes cambios en la dinámica sociocultural en la segunda mitad de ese decenio, alteraron radicalmente los gustos musicales por los grandes capitales puestos al servicio de la difusión de este tipo de música, que en parrandas interminables les inflaba el ego a los nuevos a los nuevos ricos”.
Allí no estoy atacando al vallenato, estoy refiriéndome a los marimberos, especialmente a los del barrio arriba donde me crié, que entre otras cosas no son “mitios”.
Otra cosa profesor yo no soy un investigador musical, soy Psicólogo Social decicado al estudio de los impactos de la Bonanza Marimbera en la sociedad riohachera, que alteraron los principios, valores, el interes académico entre otras cosas. Se equivocó de interlocutor. Me parece que por alguna circunstancia, que desconozco su suceptibilidad está herida.
Me ofende el hecho de que se me descontextualice.
Afectuosamente,
Martín López González
Por: Martín López González
Con todo el respeto le sugiero que no ponga en mi boca ni en mi pluma palabras que ni he dicho ni he escrito.
Si Ud. quiere le hago llegar mi tesis Cambios en los Procesos Académicos y Culturales Producto de la Bonanza Marimbera, donde en ninguna parte hablo de mitios, es más la historia de vida referenciada es la de Hernán Arredondo Arteche, un marimbero “citadino”.
La investigación no es sobre la música, en ella se demuestra el cambio del modelo social en la ciudad de Riohacha a partir del fenómeno conocido como bonanza marimbera. En mi tesis hablo de cambios en los gustos musicales, sin hablar despectivamente del vallenato. Cuando en algún ensayo hablo de música elaborado, me refiero al término técnico que utilizan los músicos, no a que el vallenato sea música inculta.
El ensayo ganador en el concurso Arte Ensayo de la Secretaria de Cultura y Turismo, Riohacha 460 años, Nos Cambiaron la Historia y nos Jodieron, hace referencia al cambio de modelo social de estudiante y deportista a marimbero, no a la música como Ud. dice que yo digo: la llegada de los mitios y los marimberos en los 70´s produjo un atraso cultural que “jodió” (sic) la sociedad riohachera e impuso la “estridente” e “inculta” música vallenata.
Si se quiere debatir seriamente sobre estas ideas, lo primero que hay que hacer es entender la propuesta global de lo que cada uno de nosotros ha investigado, sin sacar de contexto las cosas. Lo más importante de los que estamos al frente del Festival Internacional del Bolero, de la Fundación Cultural Raíces es que respetamos profundamente la música Vallenata, es más hacemos unidad de acción con la Fundación Cultura Guajira realizadora del Festival Francisco el Hombre.
Estimado profesor le agradezco infinitamente no me malinterprete pues estoy seguro de lo que he escrito y dicho, en mi discurso en el lanzamiento del libro Riohacha es un Bolero, en el Foro dije: ”Por eso fue fácil la alteración de los valores culturales propios de las décadas anteriores a los setenta, pues se puso la música de acordeón al servicio del hedonismo de los emergentes. Los grandes cambios en la dinámica sociocultural en la segunda mitad de ese decenio, alteraron radicalmente los gustos musicales por los grandes capitales puestos al servicio de la difusión de este tipo de música, que en parrandas interminables les inflaba el ego a los nuevos a los nuevos ricos”.
Allí no estoy atacando al vallenato, estoy refiriéndome a los marimberos, especialmente a los del barrio arriba donde me crié, que entre otras cosas no son “mitios”.
Otra cosa profesor yo no soy un investigador musical, soy Psicólogo Social decicado al estudio de los impactos de la Bonanza Marimbera en la sociedad riohachera, que alteraron los principios, valores, el interes académico entre otras cosas. Se equivocó de interlocutor. Me parece que por alguna circunstancia, que desconozco su suceptibilidad está herida.
Me ofende el hecho de que se me descontextualice.
Afectuosamente,
Martín López González
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