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viernes, 27 de mayo de 2016

En Maicao presentan La Bendición del Nazareno de Alejandro Rutto

El autor del libro acompañado de amigos y familiares

Maicao-.   Se cumplió ayer viernes 27 de mayo  la presentación del Libro LA BENDICIÓN DEL NAZARENO del escritor maicaero Alejandro Rutto Martínez.

El acto cultural se llevó a cabo en el auditorio del Hospital San José de Maicao y al mismo asistieron personalidades y ciudadanos interesados en el mundo de las letras.

El libro en mención es de carácter espiritual

En sus páginas el autor plasma un análisis detallado de doce relatos bíblicos, los cuales estudia a la luz del texto sagrado, en un estilo ameno y didáctico, adecuado para quienes quieren adentrarse en el conocimiento de la obra de Dios y del ministerio de Cristo en la Tierra.

El acto tuvo lugar el viernes anterior y fue organizado por la empresa Ebenezer, especializada en la organización de eventos de esta clase. 

jueves, 5 de mayo de 2016

Mi pueblo, el que me gusta



Escrito por: Alejandro Rutto Martínez 


El recuerdo del Maicao peligroso en que cada mañana anunciaban por la radio que habían amanecido cinco o seis muertos, no me gusta. 
El Maicao de las calles llena de barro y lodo, fuentes de mosquitos y enfermedades, tampoco me gusta.


El Maicao de los tiros al aire para celebrar cualquier acontecimiento no me gusta para nada como tampoco el de las sequías prolongadas en el que la ciudad se divide en dos: los que tienen plata para comprar el agua en los carros tanques y los que no tienen agua ni para remedio.
No me gusta el Maicao del matadero antihigiénico ni el de sus calles y andenes repletos de basura, por que a algunos no se le ocurre mejor idea que tirar los desechos del comercio en la vía pública.

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No me gusta el Maicao de las bocinas estridentes, de los carros parqueados en cualquier lugar y el de los caminantes sin espacio para andar.
Les soy sincero, el Maicao anteriormente descrito no me gusta y creo que tampoco le gusta a la mayoría de sus habitantes.

Si por casualidad usted alguna vez visitó la tierra "del ensueño de mi edad primera" y en su mente y sus pensamientos quedaron las imágenes que hemos relatado, déjeme decirle que usted no conoce aún al verdadero Maicao.

Por eso se me ocurre que es mi deber hablarle del Maicao que a mí me gusta, al que amo y por el que tengo una "traga" parecida a la del adolescente por la primera mujer que ha sido capaz de moverle el piso y las hormonas.

En primer lugar me gusta el Maicao de las algarabías infantiles en la puerta de los colegios. 

Soy feliz situándome en la acera del frente, a la hora de la entrada o de la salida y ver ese desfile de pequeños ángeles con rostro humano y escucharlos en el infinito compartir de sus sueños, de sus dulces travesuras, de sus increíbles ilusiones y de sus pequeñas disputas y su inexplicable capacidad para comer mango viche con sal y limón. 

Cuando veo la puerta de las escuelas convertidas en un hormiguero o humano, sonrío convencido de que Dios no se ha aburrido todavía de la humanidad y tampoco de Maicao.

Me gusta el Maicao de los periodistas legendarios, algunos de los cuales disfrutan de un lugar en su morada de la eternidad, pero aún así resisten a los embates del olvido.

Recuerdo sus voces torneadas por la experiencia de miles de horas al aire y su olfato para encontrar la noticia aunque estuviera escondida debajo de las piedras a orillas de la laguna de Majupay o en las profundidades de una pegajosa canción de Roberto Solano.

Me gusta, a propósito el Maicao que por años fue casa del maestro Carlos Huertas y cuna de sus hijos. Me gusta el Maicao, vuelve y juega, de Roberto Solano y Mario Valdelamar.

El Maicao en el que se incubaron buena parte de los versos primigenios de Víctor Bravo y en donde Abel Medina decidió un día que su pluma servía no solo para enhebrar historias sino para auscultar en la historia del vallenato.

Me gusta el Maicao de las tertulias matinales en las esquinas de los barrios en las que, aún antes de que el sol derrame su poderosa luz desde el oriente, los vecinos se encuentran para hablar de esto y de aquello y de éstos y de aquellos.

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Conversaciones familiares y comunitarias de las que casi no se ven en los tiempos del internet y de los celulares. Conversaciones en las que junto a la olla de café humeante se arreglan buena parte de los problemas de Maicao y del mundo.
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Este Maicao, el del cIelo intensamente azul, el de su cultura variopinta, el de los tres idiomas el de la limonada fría en frascos de vidrio y el tinto durante las veinticuatro horas del día, es el que a mí me gusta. Y por el que tengo una "traga" parecida a la del que se enamora por primera vez.

viernes, 29 de abril de 2016

El derecho de tener

Escrito por: Alejandro Rutto Martínez

Es un hecho: las personas desea tener más equipos, elementos y bienes con los cuales satisfacer sus necesidades. La ambición es insaciable: tener y tener; más y cada vez más. Y no es sólo un deseo o un capricho sino un derecho ligado la subsistencia del ser humano. Cada persona debe tener garantizado un mínimo vital para su subsistencia. 

martes, 12 de abril de 2016

Otra forma de discriminación: etiquetar y generalizar

Escrito por: Alejandro Rutto Martínez


Alejandro Dumas (Hijo): "Todas las generalizaciones son peligrosas, incluida ésta".

Una buena tarea para mañana y, por qué no, para hoy mismo es hacer lo posible por no etiquetar a las personas con las que habremos de encontrarnos en cualquier circunstancia de la cotidianidad. Vamos por el mundo  con unas ideas preconcebidas sobre cómo son o cómo deberían ser los demás y entonces caemos en el error de  homogeneizar a las personas que coincidan con ciertas características físicas o sicológicas.

Algunas series de televisión nos han convencido de que todas las mujeres bonitas son de poca inteligencia, dicho en sentido inverso, se nos ha inducido a creer que todas las mujeres, para ser inteligentes deben ser feas.  En las universidades hasta hace poco se creía que los mejores profesores eran aquellos que hacían más difíciles sus asignaturas y al final del curso “lograban” una mortandad académica que los hacía célebres  en la comunidad.

Así mismo, a un hombre que usa el cabello largo se le rotula de determinada manera y lo mismo a una dama que vaya con el cabello corto.  A quienes leen mucho se les dice que están locos  y a quienes practican ciertos deportes se les califica como inteligentes o como salvajes, dependiendo de la disciplina a la que se dediquen.
Las etiquetas nos llevan a tener prejuicios y a valorar a una persona sin conocerla a fondo. En algunas ocasiones nos hacemos un concepto favorable sin mayores elementos de juicio (“Todo el que es amable es buena persona” o “todo el que usa gafas es un intelectual), pero la mayoría de las veces las etiquetas nos llevan a discriminar al otro por el solo hecho de que habla como habla, de que viste como se viste, porque tiene el color de piel que tiene o porque anda con una Biblia debajo del bazo.

Queremos construir una sociedad incluyente y hemos aprendido a reclamar nuestros derechos y a proclamar el respeto de los derechos del prójimo. Sin embargo, persisten aún, enquistadas en el subconsciente de los individuos y en los colectivos sociales algunas sutiles formas de discriminación y eso nos ha llevado a creer, por ejemplo que todos los afro descendientes son buenos para los deportes y solo para los deportes, negándoles el derecho a ser considerados como personas talentosas y competentes en todas las áreas de la vida.

Una buena tarea para quienes nos consideramos como personas incluyentes y para quienes hemos decidido  no discriminar a nadie ni permitir que otro lo haga es revisar  los prejuicios que aún subsistan en nosotros y  hacer el esfuerzo para comenzar a liberarnos de ellos.  Hagamos una profunda reflexión y, en un diálogo con nosotros mismos tratemos de respondernos si no hemos cometido alguna injusticia al juzgar equivocadamente a alguien por hacer un juicio a priori de sus virtudes y defectos basados en las ideas pre concebidas y la forma en que hemos encasillado  el comportamiento, la forma de ser  y el aspecto físico de nuestros amigos o de aquellas personas con las que nos relacionamos por compartir actividades laborales, académicas o de otro tipo.
¿Qué pensamos cuando vemos a una persona muy fea? ¿Cuál es nuestro concepto de TODOS los gordos? ¿Creemos que las personas que han nacido en determinado lugar tienen Todos y SIEMPRE el mismo comportamiento? ¿Consideramos que todas las personas que desempeñan una profesión tienen todos el mismo mal (o buen) comportamiento?

No olvidemos que las generalizaciones suelen ser nocivas. Durante los años aciagos del narcoterrorismo,  los colombianos fuimos etiquetados injustamente como narcotraficantes y como terroristas. ¡Las dos cosas al mismo tiempo! Cuando la realidad no demuestra que la gran mayoría nunca hemos conocido una mata de coca ni hemos tenido un arma en nuestras manos.

La tarea para mañana y, mejor aún, para hoy mismo, es no etiquetar, no pre juzgar, no asumir como ciertas ideas preconcebidas, porque podemos caer en una injusticia aún mayor a las que tantas veces hemos criticado.



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jueves, 28 de enero de 2016

Un impactante video sobre liderazgo


sábado, 12 de diciembre de 2015

La muerte está vencida

Jesús de Nazaret: Bienaventurados los de limpio corazón, porque ellos verán a Dios

Alejandro Rutto Martínez

Cuando un verdadero creyente de la Palabra de Dios se refiere a la muerte, lo hace con un lenguaje diferente al de algunas otras personas que han mitificado a la muerte hasta el punto de verla como la llave final de la vida y el momento en que todo llega a un final frío y definitivo.

En primer lugar es importante decir que la muerte fue vencida por Jesús en la Cruz del calvario y su poder ha sido completamente relegado después del milagro de la resurrección.

Pero también hay una promesa y es la de la vida eterna. El Señor nos ha dicho que nos ama de manera ilimitada, tanto, que ha dado la vida de su hijo unigénito, para que tú, tu familia, tus amigos y yo, no perezcamos, sino que tengamos vida eterna.

Es una promesa hermosa contenida en ese versículo, Juan 3:16 que es en prácticamente la médula del Nuevo Testamento: "Porque de tal manera amó Dios al mundo, que ha dado la vida de su Hijo unigénito para que todo aquel que en él cree, no se pierda, más tenga vida eterna".

Cuando un creyente muere, no ha muerto en realidad, sino que ha regresado a la casa paterna, a vivir en la presencia de Dios, en un mejor lugar y en unas condiciones de espiritualidad que nos permiten decir que quien está bien y mejor que quien se queda es el que parte hacia la eternidad.

¿Qué debemos hacer entonces para alcanzar la  eternidad?  Nada, no hay que hacer nada porque todo lo que debía hacerse lo hizo Jesús al ofrendar su vida para redimir nuestros pecados y convertirnos en seres aceptados por Dios.

Pero una cosa no debemos olvidar es nuestro deber de guardar la Palabra de Dios. Esa es la condición para no ver la muerte espiritual, la muerte segunda, la muerte definitiva, la que nos separa de Dios.

Si usted quiere hacer algo por usted mismo y por su futuro, ésta es la mejor recomendación: lea la Palabra de Dios, estúdiela y guárdela, entonces usted conseguirá algo más importante que el mejor de los tesoros y es la seguridad de derrotar a la muerte y asegurar u lugar en la vida eterna.


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viernes, 4 de diciembre de 2015

Tres amigos que no son tus amigos


Alejandro Rutto Martínez

Les voy a hablar hoy de tres pecados dañinos como todos. Dos de ellos, estoy seguro, te han afectado por lo menos una vez en la vida, y cuando así ha sido, has experimentado un estado de ánimo en el que se mezclaron la rabia, la impotencia y las ganas de vengarte. Además, te costó mucho trabajo recuperar lo que perdiste por causa de ellos. 

En primer lugar hablaremos del chisme, sobre el cual se ha dicho que es el deporte nacional, no sólo en tu país o en tu ciudad, sino en muchos otros lugares.  El chisme, consiste en una noticia, verdadera o falsa, con la cual se pone en tela de juicio la honra de alguien. Léase bien, lo que hace que un comentario se convierta en chisme, no es el hecho de que sea verdad o mentira, sino un daño causado a la persona sobre la que se habla. 

La Biblia se refiere al chisme en varios pasajes, como por ejemplo, en el libro de proverbios 16:28  “El hombre perverso levanta contienda, y el chismoso aparta a los mejores amigos.”    

Desde el punto de vista bíblico el chismoso es un perverso y, entre otros males causa el de apartar a los amigos. Así es el chisme, conlleva maldad, y sus consecuencias casi siempre son irreparables. 

Otro de los pecados a los que queremos referirnos se relaciona con el anterior. En algunas regiones del Caribe colombiano se habla de ser "carbonero" y es cuando un amigo o conocido incita a otro amigo o conocido para que actúe contra un tercero,  "Fulano le está metiendo carbón a Zutano para que le reclame a Mengano".   El carbón conlleva una alta carga de mala intención porque su propósito no es solo enterar al amigo para que se cuide sino para que se enfade y actúe contra una tercera persona. 

La Biblia se refiere  con cierta frecuencia a las personas rencillosas , es decir, a aquellas que son proclives a las riñas y a causar hostilidades entre dos o más personas. 

El libro de Proverbios nos lleva nuevamente a explorar los caminos de las relaciones interpersonales y nos advierte sobre la gravedad de "carbonear" a los amigos. Leamos Proverbios 16:29: "El hombre violento incita a su prójimo, y lo guía por camino que no es bueno"    ¿Se da cuenta?  "Carbonear" es incitar y quien lo hace es una persona violenta.Mire usted el fruto que recoge la persona que carbonea y la que lo escucha: el uno guía y el otro lo sigue. ¿Por dónde? Por el camino malo. No creo que usted esté interesado en guiar a alguien por el camino malo ni en seguirlo por ese erróneo sendero. 

El tercer pecado  es ese que usted y sólo usted sabe que ha cometido. Es un asunto entre usted su conciencia y Dios. Usted tiene defectos que pocos le conocen pero también ha incurrido en faltas hasta ahora no conocidas por los demás.  No permita que su conciencia lo siga carcomiendo ni confíe en que el secreto es en verdad un secreto. La Biblia nos dice algo que deberíamos aprender de memoria y recordarlo todos los días de nuestras vidas: "Porque no hay nada oculto que no haya de ser manifestado; ni escondido que no haya de salir a la luz" (Marcos 4:22)

¿Qué hacer entonces? Confiese  su pecado al Señor.  Jesucristo murió por nuestros pecados, incluida esa falta que a usted tanto lo tortura. Confíe en Dios, confiese su pecado con verdadero arrepentimiento y comprométase a no pecar otra vez. 
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jueves, 3 de diciembre de 2015

¿Cómo curarnos del pecado?

Alejandro Rutto Martínez


Los pecados nacen en un lugar muy especial, recóndito, casi inexpugnable. Si usted fuera un detective experto en localizar el sitio en que el pecado nace, seguramente fracasaría en su intento. ¿Sabe por qué? Muy sencillo, el pecado tiene su origen en el corazón de las personas, en sus pensamientos, en la fibra íntima de su ser.  Los seres humanos primero pensamos y luego actuamos.  Todo lo que emprendemos, suele ser sobre la base de un plano previamente diseñado en un tallercito ubicado por allá en el fondo del corazón. 

En el libro de Santiago podemos leer cómo los malos pensamientos pueden desembocar en acciones lamentables. Analice el siguiente texto: “Sino que cada uno es tentado, cuando de su propia concupiscencia es atraído y seducido. Entonces la concupiscencia, después que ha concebido, da a luz el pecado; y el pecado, siendo consumado, da a luz la muerte ”.

Para el caso la concupiscencia es un fuerte deseo por aquello que no debe hacerse, es sentir  deseos (o exceso de deseos) no aprobados por  Dios.   El diccionario de la Real Academia la define como deseo de bienes terrenos y, en especial, apetito desordenado de placeres deshonestos.

Mire como lo uno conduce a lo otro y a lo otro, en un grado de ascendente y peligrosa gravedad. La concupiscencia degenera en pecado y el pecado se degrada aún más y se traduce en muerte (Santiago 1: 14-15). 

Es obvio que la tentación y el pecado no proceden de Dios sino de la naturaleza carnal y por lo tanto pecaminosa del hombre, la cual fue adquirida desde los tiempos primigenios del génesis en la caída de la primera pareja humana. 

Si usted siente que es pecador, le tengo una noticia. Y si usted cree que no es pecador, también le tengo una noticia, a decir verdad, la misma noticia. Todos, absolutamente todos somos pecadores. Así lo manifiesta el apóstol Pablo en su carta a los Romanos capítulo 3, verso 23: “Pues todos han pecado y están privados de la gloria de Dios”. 

¿Mala noticia o buena noticia?Muy mala por cierto y peor aún para quienes no se consideran pecadores. Todos hemos pecado y todos habíamos sido destituidos de la gloria de Dios. Solo la infinita misericordia del Señor nos da una nueva oportunidad y nos permite confesar nuestros pecados, con lo cual podremos recibir el perdón y limpieza de parte suya. Así lo consigna el la primera carta del apóstol Juan, capítulo 1 verso 9: "Si confesamos nuestros pecados, Dios, que es fiel y justo, nos los perdonará y limpiará de toda maldad"    ¿Cuál es la clave entonces?  Una sola, confesar, ese es el verbo más valioso. 

Mi estimado amigo, hay una invitación para usted y para mi, y para quienes compartimos nuestra naturaleza pecadora. Confesemos nuestros pecados delante del Señor, con quebrantamiento, con arrepentimiento y con un profundo deseo de no reincidir. 

Actuemos de esa manera: reconocer que somos pecadores; confesar nuestros pecados delante de Dios y mantenernos firmes en la decisión de no pecar nunca más.  Así, será el mismo Dios quien nos perdonará y limpiará de toda maldad. 

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martes, 1 de diciembre de 2015

¿Tienes un problema? Tenemos la solución

Alejandro Rutto Martínez

David era un joven pastor de ovejas, hijo de una numerosa familia, de buen porte, elegante, el menor de todos sus hermanos. No tenía nada que lo diferenciara o que lo hiciera grande, pero se distinguía por un gran amor a Dios. El Señor lo unge como rey de Israel para reemplazar a Saúl, quien se había apartado de la voluntad soberana del Creador. 


Lea también Los amigos son como hermanos

Sin embargo, su ascenso al trono no fue  inmediato. Antes debería vivir un episodio cumbre de su vida cuando enfrente a Goliat y lo derrote armado solo de su valor como creyente, una rudimentaria honda y cinco piedras lisas.  David venció al gigante pero cayó en desgracia con el rey Saúl quien lo persigue para matarlo y lanza contra él feroces ataques para acabar con su vida. David elude esta persecución y aún en sus momentos de mayor angustia respeta la honra y la vida de Saúl como el "ungido de Jehová".  Es tanta su reverencia por el rey que en dos ocasiones lo tiene en sus manos y, en lugar de atentar contra él, le perdona la vida y espera sólo que Dios actúe. 

En sus momentos de mayor quebrantamiento, cansado de huir, atemorizado por el peligro, exhausto por sus constantes viajes, se siente al borde de la derrota. Pero es en este momento cuando escribe el salmo 34  uno de sus más bellos textos, en el que expresa su confianza en Dios, seguro de que nunca va a ser abandonado y de que cada una de las promesas relacionadas con su reinado se cumplirán a su debido tiempo. 


El salmo 34, en su versículo 4 dice textualmente: "Busqué a Jehová, y él me respondió y me libró de todos mis temores."


Si leemos bien este corto mensaje, podemos encontrar tres cosas que nos van a ayudar en nuestra vida espiritual y nos permitirán enfrentar cualquier dura circunstancia que se nos presente: 


1. David buscó a Dios

2. Dios escuchó a David
3. Dios libró a David de todos sus temores


David pudo resolver su difícil situación de manera desesperada, como por ejemplo, huyendo muy lejos y no regresar nunca más, con lo cual hubiera renunciado a las promesa que Dios le había hecho de ser rey de Israel; o pudo enfrentarse con el ejército de Saúl, con lo cual habría expuesto gravemente su vida y la de quienes le rodeaban. También pudo matar a Saúl, con lo cual hubiera manchado sus manos de sangre, con las graves consecuencias que ésto le hubiera generado. 
En lugar de eso, hizo lo más simple: buscar a Dios y obtuvo la respuesta adecuada pues, el Padre Celestial no sólo lo escuchó, sino que le respondió y lo libró de todos sus temores. 

¿Estás atravesando por una circunstancia difícil?  Busca tú también a Dios y prepárate pues Él te va a escuchar y te va a responder. Y lo mejor de todo: Él, en su infinita misericordia, te va a librar de todos tus temores.  Ya lo hizo una vez con David. Hoy lo hace contigo, un hijo al que Dios quiere con entrañable afecto. 

Lea también La educación es una responsabilidad de todos

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lunes, 30 de noviembre de 2015

Los amigos son como hermanos

Alejandro Rutto Martínez

Dedicado al pastor Santander Ortega

Así lo dice la Biblia, cuando nos invita a amar a los amigos.  Proverbios 17:17  es un conocido y hermoso texto bíblico que se compone de dos partes. 

Primero nos invita a amar amar al amigo. Lógicamente es un amor fraterno, transparente...bonito.  Es el amor que se profesa por aquellos hermanos que la vida pos ha regalado a través de distintas circunstancias y escenarios como la escuela en la que estudiamos, el vecindario en donde crecimos, la universidad en la que nos hicimos profesionales o, simplemente, el consultorio médico en el que charlamos dos horas con alguien que hasta ese momento era un desconocido, mientras esperábamos al médico que nos iba a atender. 

La amistad nace así: por circunstancias diferentes y, algunas veces casuales. Así nace la amistad y luego crece hasta convertirse en una relación duradera y sólida. 

La segunda parte de la cita bíblica que nos ocupa le da a los amigos la estatura de hermanos. Sobre todo, les da ese calificativo en los tiempos de angustia.  En los buenos tiempos estamos siempre acompañados de hombres y mujeres que nos ofrecen su ayuda y sus servicios. Sin embargo, en los tiempos de angustia, muchos se alejan de nosotros y es ahí en donde conocemos a nuestros amigos. Es a esos los que la Palabra del Señor compara con los hermanos. 

 Bien sabemos que no elegimos a nuestros hermanos. Ellos son un regalo de Dios y Él, en su infinita sabiduría, nunca nos preguntó si queríamos hermanos, hermanas o cuántos de ellos queríamos tener. Los hermanos son el regalo máximo de la vida y de nuestros padres. Y por supuesto, uno de los más preciados regalos del Señor.

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sábado, 28 de noviembre de 2015

La educación es una responsabilidad de todos

Alejandro Rutto Martínez

Dedicado a Ramiro Choles Andrade

¿Quién debe garantizar el derecho a la educación? Probablemente el dedo índice señalará hacia el Estado y a sus distintas dependencias: Ministerio de Educación Nacional, Secretarías de las Entidades Certificadas, autoridades locales. Y están en lo cierto quienes así piense. La educación es un derecho fundamental , en ese orden de ideas, el estado debe hacer todos los esfuerzos para que cada ciudadano vaya a la escuela y a la universidad. Pero no podemos perder de vista a la familia, como responsable de primer orden.

De hecho, el hogar es la primera institución educativa por la que pasa un estudiante. Lo que se enseña en casa tiene la ventaja de que no vuelve a olvidarse jamás, sobre todo si la enseñanza es reforzada con el buen ejemplo de los mayores.

Nadie podrá reclamarle al Estado o a otros actores sino hay un auto examen sobre el cumplimiento del deber de educar a los más pequeños.

El buen padre de familia deberá preguntarse una y otra vez: ¿Qué he hecho por la educación de mis hijos?  ¿Como puedo hacer para que aprenda lo esencial, pero también a ser una mejor persona?  ¿En qué he fallado hasta el momento y de qué manera puedo corregir mis errores como educador familiar, antes de que sea demasiado tarde?

Mucha atención, queridos padres de familia. Los hijos crecen demasiado rápido y no podemos dejar para mañana o para más adelante lo que debemos hacer ahora, en este momento, ya mismo. Si perdemos tiempo, los muchachos crecen y lo que no pudimos enseñarle nosotros lo aprenderán de los maestros de la calle o de Internet y es posible que no sea exactamente lo que nos hubiera gustado enseñarle.

La consigna es enseñar a nuestros hijos y ayudarlos a entender que su educación depende, inicialmente de ellos mismos. Si sus sueños son grandes, así mismo serán grandes sus logros. Es una ley inevitable de la vida.
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martes, 17 de noviembre de 2015

Colombia 0- Argentina 1: siete razones de una derrota

Alejandro Rutto Martínez

1. Argentina fue superior. En algunas ocasiones se atribuye la derrota al clima, a las circunstancias, a la ausencia de jugadores claves o a los fallos arbitrales y cuesta darle el merecido reconocimiento al rival. En este caso, debemos aceptar sin rodeos que la Argentina de Martino se paró mejor en la cancha, aprovechó sus virtudes y capitalizó los errores del contrario, para asegurar un resultado que pudo ser aún más amplio. 

 2. A Colombia le pesa el mal momento o la falta de continuidad de algunos de sus jugadores más importantes. Cristian Zapata no es el mismo de sus mejores épocas, James Rodríguez solo muestra chispazos de su buen fútbol, Carlo Bacca y Teófilo Gutiérrez no encuentran el camino del gol y Macnelly Torres no logró hacer una buena sociedad en el medio. 

 3. No se generan opciones de gol. La única vez que Colombia pudo inquietar a Argentina fue por un error de la defensa, conjurado oportunamente por los guardametas “Chiquito” Romero. Un equipo con aspiraciones de ganarle al finalista de la última edición del mundial tiene que anotar. Sobre todo cuando actúa de local en un estadio completamente lleno. 

 4. La debilidad en la marca. Colombia extraña en cada partido a Abel Aguilar y ahora también a Carlos Sánchez. Los encargados de la marca en el medio no salen en las portadas de las revistas, ni ganan sondeos de popularidad y su trabajo es poco reconocido, pero se notan mucho cuando no están. Parte del equilibrio de la Selección en el mundial se lo dieron sus hombres de marca quienes recuperaban en el medio y detenían a los rivales al tiempo que surtían a las figuras, como sucedió con el pase de Abel Aguilar para anotar el legendario gol del estadio Maracaná ante Uruguay. La falta de presión en el medio hizo que Argentina le quitara el balón a Colombia y desnudara por completo sus falencias defensivas. 

5. La mala entrega de algunos defensores. Fabras, por ejemplo, es un excelente defensor y tiene un futuro inmenso en la selección, pero cada pelota que llega a sus pies es entregada a un rival. Grave situación para un equipo que sustenta su buen juego en la posesión del balón.

6. La falta de jerarquía del equipo para afrontar la adversidad. Algo así como la garra charrúa de los uruguayos que nunca se dan por vencidos. O la energía de los ecuatorianos que no se dejar meter miedo de los rivales grandes y son capaces de derrotarlos aún cuando juegan de visitante, algo que también sabía hacer Colombia y que debe recuperar de manera urgente. 

7. James no estuvo en su acostumbrado nivel. Y no es para preocuparnos, pero la selección se está volviendo “Jamesdependiente”. Para esto hay dos soluciones: que el 10 del Real Madrid recupere su nivel o que la Selección tenga un juego colectivo que funcione con los actores que estén en buen nivel. Seguramente las dos cosas van a ocurrir en los próximos partidos y Colombia va a recuperar no solo su buen nivel de juego, sino sus opciones de clasificar al mundial.
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miércoles, 28 de octubre de 2015

Primer aniversario del profe Federico


Escrito por:  Alejandro Rutto Martínez

Se cumple hoy un año desde cuando partió a la eternidad el profesor Federico Barrios, toda una institución para el sector educativo y el deporte en Maicao. Cartagenero de nacimiento se vino desde su juventud hacia nuestra tierra y aquí laboró duramente en la formación de nuevas generaciones con las que compartió en el aula, en la calle y en las canchas de los barrios más humildes. 

 Lo recordaremos siempre defendiendo sus posiciones con firmeza y entusiasmo, con sus libros debajo del brazo y con la vieja tiza blanca entre sus dedos. Lo recordaremos refiriéndose a sus hermanos y sobrinos con un respeto y veneración que lo ubican como uno de los mejores hermanos y uno de los mejores tíos del mundo. 

 Yo tuve el privilegio de conocerlo y de tratar con él, y puedo certificar que era un hombre de bien, entregado de lleno a todo lo que hacía. Y estaba tan entregado que tuvo poco tiempo para algo distinto a lo que más le gustaba: su oficio de maestro; su vocación de director técnico de fútbol y su gusto por las buenas tertulias con los amigos. 

 Tan ocupado estaba que no tuvo tiempo ni para salir al centro y comprarse un celular. Por eso era tan difícil hablar con él. Para oírlo había que verlo. 

Y para verlo había que encontrarlo. Y para encontrarlo había que hacerle un seguimiento decidido y cuidadoso detrás de él en cada una de las escuelas donde pasaba las mejores horas de su vida, por las canchas de piedra y polvo en donde entrenaba a sus discípulos o en donde dirigía sus ardorosos encuentros futbolísticos. 

 Pero él podía estar en tantos lugares que no era tan fácil encontrarlo: a veces visitaba a sus amigos y en ocasiones iba a la casa de sus estudiantes para saber por qué no habían ido a sus últimas clases o entrenamientos. 

 La vida del profe Federico fue un sendero recto que conducía desde el manantial de los sueños hasta el propósito supremo de convertir a los niños y jóvenes en mejores personas de lo que eran, mediante el diálogo constante, la enseñanza oportuna, la disciplina estricta y la alegría permanente. 

 Hace un año el profe Federico cerró sus ojos para siempre, su corazón dejó de latir y su nombre pasó a ser no solo un recuerdo imborrable, sino una leyenda difícil de olvidar y difícil de escribir. Lo mejor de su vida quedará escrito en el corazón de quienes lo conocimos; en la libreta de apuntes de quienes recibieron sus orientaciones y en la sonrisa de quienes lo recordarán siempre con aprecio y con gratitud. 

 El profe Federico Barrios será recordado como el cartagenero de corazón maicaero que un día vino a trabajar en lo que le gustaba y se quedó en una ciudad de la que se enamoró perdidamente y para siempre. Dios bendiga a la familia del profe Federico. Felicitaciones por llevar su sangre y su apellido. Y felicitaciones también por hacer parte del árbol genealógico de alguien que inventó una forma de enseñar a la que bien pudiéramos llamar "Pedagogía de la pasión”.
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lunes, 3 de agosto de 2015

Alejandro Rutto Martínez, periodista de vocación, entusiasmo y pasión

La carrera de Alejandro Rutto Martínez como periodista se inició en los años setenta más exactamente en 1979, en las aulas del colegio San José, en donde su profesor de español y literatura, Ramiro Choles Andrade le encontró un especial talento para escribir textos de buena calidad. Lo primero que le encomendó fue actualizar diariamente el periódico mural, labor que el jovencito de 15 años adelantaba con particular agrado. Un poco después le asignó la tarea de publicar El Joseísta, periódico impreso que consistía en cinco hojas mimeografiadas por ambas caras en las que se publicaban noticias del colegio, artículos de los estudiantes y profesores y algunos pasatiempos. Lea también Biografía de Alejandro Rutto Martínez

En esos tiempos el joven Alejandro escribía con frecuencia sobre los temas más importantes del colegio: la incomodidad de los salones, la falta de espacios para la práctica del deporte los buenos resultados del equipo del San José en los intercolegiados de fútbol y la necesidad de construir una sede más amplia que albergara al creciente número de estudiantes que deseaban y necesitaban cursar sus estudios en el plantel.

 En 1981 el colegio inició un programa de radio en la emisora Radio Península la más importante para la época en la ciudad, y se asignó la responsabilidad de dirigirlo al profesor Ramiro Choles Andrade, quien no dudó en llamar a Alejandro Rutto para que hiciera parte del equipo de colaboradores. Se emitía los domingos al mediodía y Alejandro Rutto escribía artículos y redactaba notas de interés que eran leídas por él mismo y por sus compañeros. Se trataba de temas clásicos de las principales asignaturas: buscar explicación a los fenómenos naturales, recomendaciones para escribir y hablar mejor, normas de buen comportamiento, etc. Rutto era la persona más cercana al director se fue ganando su confianza hasta el punto de convertirse en una especie de subdirector. Los días en que el profesor no asistía, por algún motivo, era él quien se encargaba de que la emisión saliera al aire sin ningún tipo de contratiempos.  Lea también Alejandro Rutto Martínez, algo sobre su vida

La experiencia en la radio académica continuó cuando ingresó a la Universidad y se hizo cargo de los programas Adelante Guajira y Vida Universitaria, siempre al lado de compañeros con quienes había tenido su experiencia inicial: William Mercado, José Carlos Molina, Eudes de Armas, Ledys Charriz, Ricardo Ramos, Vicente Salcedo y Carlos Chica entre otros. 

 En 1.984 se da un hecho que lo llevaría a dedicarse de lleno al periodismo y a convertirse en un periodista de tiempo completo. Ese año se fundó el Deportivo Maicao, equipo de fútbol que representaría a la ciudad en el campeonato nacional de Segunda División. El torneo era el segundo en importancia en el país, después del campeonato de la Dimayor. Maicao y Riohacha armaron equipos muy competitivos para enfrentar a los cuadros más importantes como Junior y Unión Magdalena. 

En la costa Caribe se vivía una fiebre por éste campeonato que llenaba el vacío existente en aquellas plazas en donde no había fútbol profesional. El Deportivo Maicao con su uniforme de franjas horizontales negras y rojas y el Deportivo Riohacha con el verde y blanco de la bandera de La Guajira distribuido en su uniforme se volvieron dos de los cuadros más fuertes y sus enfrentamientos directos se constituyeron en el clásico más importante del campeonato. 

 Cada domingo miles de aficionados apoyaban a sus equipos y en cada esquina se hablaba de las mejores jugadas de la semana. En la emisora local “La Voz de la Pampa” se dio inicio a un programa deportivo denominado La Ventana del Deporte, integrado por Luis Octavio Cruz, Tomás Pérez Ramírez y Ernesto Acosta Solano. A ese equipo llegó un poco después, con su acostumbrado entusiasmo, Alejandro Rutto Martínez, quien se encargaba de escribir artículos cortos para leerlos al aire. Posteriormente se dedicó de lleno al comentario espontáneo y fue visto como una de las jóvenes figuras del periodismo local.

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El programa deportivo fue un completo éxito en audiencia. A la una de la tarde, después de la emisión central del noticiero, la gente de Maicao quedaba pegada a la radio para conocer las últimas novedades del Deportivo Maicao, que por ese entonces tenía como director técnico al samario Luis Montúfar y contaba con una nómina de directivos de la que hacían parte Hernán Brugés Guerra, Luis Arrieta Madera, Laureano Palencia, Luis Serrano Urbina, Adex Aramendiz, Franklin Iguarán, entre otros.

Maicao vivía un punto de quiebre muy importante, pues su comercio comenzaba a tropezar con dificultades luego de la drástica devaluación de la moneda venezolana. Sin embargo, su actividad comercial era fuerte. El bullicio en las calles llenas de compradores, el pito de los buses anunciando su llegada y su salida desde las oficinas ubicadas en pleno centro, el grito de los vendedores ambulantes anunciando sus productos, era el decorado de un día cualquiera en el sector comercial y el mercado público.

En Maicao prácticamente no había en qué divertirse y por eso el partido del Deportivo Maicao era un verdadero acontecimiento. Cuando el equipo jugaba de visitante, buena parte de los aficionados se desplazaban a Riohacha con el único interés de seguir las acciones del equipo rojinegro de la frontera.
Todo ese fervor era capitalizado por la prensa deportiva, especialmente la radio cuya audiencia crecía cada vez más.  Su único vacío era la de las transmisiones en directo, pues los partido aún no se transmitían por radio, a diferencia de Riohacha en donde existía un “combo deportivo” integrado por Jairo Romero, Juaco Murgas y Eladio Narváez, que acompañaba al Deportivo Riohacha en todos su partidos, bien fuera de local o de visitante.

Transmisiones en directo

La temporada de 1.985 comenzó casi a mediados de años y por esa época Luis Octavio Cruz, Alejandro Rutto y Ernesto Acosta reciben una oferta de Orlando Cuello, gerente de Radio Península para que se trasladen a ésta emisora. El primer reto que les impone es transmitir en directo el partid inaugural entre Deportivo Maicao y Junior. Para animarlos contrata también, solo para ese partido, a Jairo Romero y Eladio Narváez. La dupla de narradores riohacheros se hizo cargo del primer tiempo del partido y los maicaeros asumieron el reto en el segundo tiempo. Al final del partido, felicitaciones para los veteranos y para los principiantes. El juego quedó 1-1. En el primer tiempo marcó Junior y en el segundo tiempo empató el Deportivo Maicao, un resultado muy positivo que la afición celebró ruidosamente acompañada del legendario grito de gol de Luis Octavio Cruz, y el posterior comentario de Alejandro Rutto Martínez.

Rutto y Cruz conformarían uno de los dúos radiales más escuchados de Caribe colombiano. Su imparcialidad, su objetividad, la forma innovadora en que presentaban las noticias y la emoción que le imprimían a las transmisiones deportivas los llevó a ganarse el respeto de la afición y en general de la audiencia de Maicao, Riohacha y el Caribe colombiano.

Ese año debieron transmitir a la audiencia una noticia dolorosa: la muerte, en un accidente aéreo, del dirigente deportivo Hernando Urrea Acosta, maicaero, presidente de la División Aficionada del Fútbol Colombiano, Difútbol. El hecho ocurrió el 24 de julio  y en la emisión  del día siguiente del programa PENÍNSULA Y LOS DEPORTES,  Cruz y Rutto propusieron que al estadio San José de Maicao se le cambiara el nombre y en adelante se llamara Hernando Urrea Acosta.  La propuesta no fue sometida a aprobación del Concejo Municipal, Asamblea Departamental u otra autoridad pero el uso diario que los periodistas hicieron del nombre y la buena acogida por parte de la ciudadanía, sirvió para que el cambio de nombre se diera de hecho.

En los años 1985, 1.986, 1987, 1.988 y 1.989 el equipo Rutto-Cruz-Acosta estuvo acompañando a los equipos guajiros en todas sus presentaciones. En 1989 el Deportivo Maicao clasificó a las finales nacionales del torneo de Segunda División enfrentando a los mejores equipos del país y con la transmisión de la Voz de la Pampa en directo para todo el país, en conexión con la cadena Caracol.



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