miércoles, 8 de abril de 2015

La Guajira, obra maestra de Dios

Alejandro Rutto Martínez

Hoy es un día hermoso para dar gracias a Dios por la forma en que se inspiró para crea uno de los lugares más hermosos del planeta y mañana también…y todos los días. Porque la obra de Dios ha sido tan grande y bella que no habrá forma de expresarle nuestra inmensa gratitud por el obsequio incomparable de ríos, mares, paisajes y gentes.
Yo me imagino la febril actividad y el movimiento incesante que hubo en el taller de Dios el día que todos los obreros allí presentes se dedicaron de lleno a crear la más hermosa península de Sudamérica: en el centro Dios omnisciente entregaba los planos terminados del inimaginable lugar que había concebido en sus arduas sesiones de exquisita tarea artística. Y sus ángeles lo tomaron en sus manos inmaculadas y de inmediato se pusieron a hacer cuidadosamente la labor encomendada. Consiguieron pinceles, acuarelas de luminosos colores para dibujar atardeceres y un lienzo enorme para plasmar muchos kilómetros de mar, y finos corpúsculos de arena para bosquejar el dorado tapiz del enorme semi desierto en el que convivirían hermanados y por centenares de años buenos las burbujas multi cromáticas de la vida y la quietud conmovedora de lo absoluto.
Algunos ángeles querían trabajar más de prisa porque tenían mucho trabajo acumulado, pero los más juiciosos les llamaron la atención y les explicaron que lo demás podía esperar. Tenían la orden de perfilar una obra maestra y la prisa no era una buena consejera. Por esta razón ordenaron rehacer las curvas lisas de las costas y trazar en cambio algunos salientes y entrantes que decoraran el cuadro final. De esta manera fueron apareciendo Punta Gallinas, Punta Espada, Bahía Portete y, por supuesto, el mítico Cabo de La vela.
Cuando el trabajo iba muy avanzado una cuadrilla de ángeles expertos en alturas comenzaron a levantar una montaña  gigantesca y al lado otra y otra más y eligieron los dos picos más altos para colorearlos de blanco eterno.   Un ángel entrado en años, experto en el color azul trazó varias líneas de ese color y estrellas una más larga y gruesa a la que después se llamaría Río Ranchería.
Unos laboriosos ángeles expertos  paisajes variopintos decidieron que no todo podía ser igual y por eso se dieron a la tarea de crear tres guajiras en lugar de una: por allá estaría la más seca y desértica; en el centro una región menos seca más poblada y más al sur una bien fértil y tapizada de verdes praderas.
Alguien más se puso en la tarea de dibujar unos puntos grandes que representaban a las ciudades y unos puntos más pequeños que representarían a los pueblos. El lápiz fue usado de manera prolongada porque los pueblos fueron muchos. Fue necesario traer otro y otro más. Y luego dibujaron unos puntos más pequeñitos  a los que llamaron rancherías y fueron muchos, muchos de manera que no había país en donde hubiera más puntitos que en la hermosa Guajira.
Dios no permitió que los ángeles crearan a las personas. Fue una tarea que se reservó para sí mismo pues quería crear seres humanos con un corazón tan grande como la misericordia que Él mismo tiene: haría niños inocentes y amorosos, dedicados a disfrutar su infancia y a soñar con su porvenir y también crearía mujeres en cuyos ojos estaría siempre la veta del inconmensurable amor por los suyos.
De esa manera Dios hizo la mejor de sus obras y quiso regalarla a quien la mereciera pero después de mucho pensar, decidió reservarla para sí y por eso la guajira es maravillosa, inmensa, ilimitada y es propiedad reservada, por el dueño de la vida. Propiedad del dueño de la vida…territorio de Dios.
frontpage hit counter
frontpage hit counter

lunes, 6 de abril de 2015

Carlos Gaviria: el librepensador

Amylkar D. Acosta M

 “Feliz el hombre a quien al final de la vida no le queda sino lo que ha dado a los demás” Armando Fuente

A La vida del Profesor Carlos Gaviria Díaz parece inspirada en la Ilustración y los ilustrados del siglo XVIII, quienes le dieron vida al movimiento intelectual de los Enciclopedistas, embrión de la Revolución francesa y de Los derechos del hombre y del ciudadano, condensados en sus tres principios luminarios: la libertad, la igualdad y la fraternidad.

La Ilustración sólo blandió un arma, la razón y apeló a un medio, la educación, al considerar que si al pueblo se le educaba y se le develaba la verdad no reincidiría en los mismos errores y horrores del pasado cruel. Carlos Gaviria a lo largo de su trasegar durante todo su periplo vital, que osciló entre la academia y la Política, sólo apeló a la razón como arma, fulminante por lo demás, para refutar a sus contradictores y para defender sus ideas, de las que siempre fue un militante irreductible. Siempre creyó, como demócrata integral que fue, en la fuerza del argumento y jamás recurrió ni cohonestó con quienes esgrimen el argumento de la fuerza para imponer sus puntos de vista.

Y la educación para él fue su obsesión y a ella se consagró por luengos años; su cátedra no estuvo confinada a las aulas universitarias, empezando por su Alma mater (la Universidad de Antioquia), porque siempre que daba una conferencia o participaba en paneles y foros lo hacía en ejercicio de su cátedra, ya que él nunca dejó de ser el inspirado y acucioso Profesor que conocimos desde la década de los años 70 del siglo pasado.

 Carlos Gaviria fue en vida un brillante intelectual, en todo su esplendor, siendo esta la más alta escala de la condición humana, a la que sólo les es dable acceder a mentes privilegiadas como la suya. Siempre que hablaba y él era de un verbo muy cultivado y elocuente, con un enorme poder de convencimiento, ponía a pensar a sus interlocutores y cautivaba la atención y el respeto del auditorio por su bagaje de conocimientos y el arsenal de argumentos, con toda su carga de profundidad.

Él, además de ser un aquilatado jurisconsulto era un aplomado filósofo del derecho, émulo de Sócrates, de Kant, de Kelsen y cómo no, de su filósofo de cabecera, el austríaco Ludwig Wittgenstein. De modo que cuando llegó a la Corte Constitucional admirable, a la que le dio vida la Asamblea Nacional Constituyente de 1991, le hizo honor y le dio lustre a la misma, sus providencias al igual que sus salvamentos de voto como Magistrado son piezas magistrales que dejaron una profunda e indeleble huella y siguen siendo obligados referentes del Derecho aún allende nuestras fronteras patrias.

El ex presidente de Francia, el socialista Francois Mitterrand afirmó en alguna ocasión que “la responsabilidad del intelectual es mayor que la que puede tener un financista, un empresario o el gerente de una empresa, por una sola razón, porque influye sobre demasiadas personas”. Intuyo que fue esta responsabilidad del intelectual y su compromiso con Colombia los que lo llevaron a abrazar una causa partidista, liderando el Polo democrático y aspirando a la Presidencia de la República.

Él encontró en el proselitismo político el mejor conducto para amplificar su mensaje, siempre coherente, consistente, porque en Carlos Gaviria no se conoció la doblez o el transfuguismo ideológico ni transigió con él.

Su vida toda, que fue ejemplar y ejemplarizante, también lo fue en la Política, él demostró que se puede ser político y honrado a la vez. Él, que fue socialista a fuer de Liberal manchesteriano, predicó con su propio ejemplo que la ética es consustancial con el sano ejercicio del derecho y de la Política, que tratar de separarlos es como intentar aplaudir con una sola mano.

Pero, además, era un convencido con Ludwig que “la ética no se predica, la ética se muestra” y que “la ética y la estética van de la mano”, así como también abrigaba la esperanza de que “la belleza y la verdad sean una sola cosa”. Ese era su talante! Carlos Gaviria, el libertario y el vanguardista se nos fue, pero su pensamiento y sus ideas quedan sembradas en la mente de sus incontables discípulos y seguidores, entre los cuales me cuento, porque su legado lo trasciende, como a todos los grandes. 

Su erudición y su capacidad oratoria la vamos a echar de menos, pero allí nos quedan sus obras, sus escritos y sus conferencias, que seguirán siendo una invaluable fuente nutricia para las presentes y las futuras generaciones del intelecto. Carlos Gaviria fue un adelantado de su época, quien mostró su gran lucidez y sapiencia hasta la víspera de su deceso.

De él puede decirse que al igual que los barcos de guerra se hundió en los piélagos del ancho mar con las luces encendidas en medio del fragor de la batalla. Él mismo, apelando a uno de sus autores favoritos de la literatura, que era una de sus tantas veleidades intelectuales, al lado de la música y el deporte, Jorge Luis Borges, trajo a colación en una de sus acostumbradas conferencias, esta vez sobre el mundo de la metafísica borgiana, una de sus frases metafóricas que fue como una premonición de lo que sería su momento postrero: “el río es el río de Heráclito, que se confunde con el tiempo, que somos nosotros, con lo transitorio, con lo que pasa, con lo ilusorio”. Paz en su tumba! Bogotá, abril 5 de 2015 www.fnd.org.co


asp hit counter

asp hit counter

jueves, 26 de marzo de 2015

El rugido del helicóptero en el cielo de Maicao

Escrito por: Alejandro Rutto Martínez

Los habitantes de Maicao debimos soportar durante tres días seguidos el rugido de un helicóptero de las Fuerzas militares el cual volaba tan bajo que se podía observar el rostro nervioso de los oficiales que desde su privilegiada posición oteaban el horizonte, mientras empuñaban firmemente sofisticadas armas de guerra.

Los maicaeros ya tenemos suficientes preocupaciones, pero un aparato tan ruidoso  y ensordecedor en un lugar en donde no son frecuentes los vuelos de aeronaves porque ni siquiera hay aeropuerto, no podía menos que despertar curiosidad y generar toda clase de comentarios. Entre otras cosas porque el sobre  vuelo de helicópteros ocurre como reacción  a sucesos desafortunados como el secuestro  y otra clase de delitos.

La gente tiene suficientes motivos de preocupación, decíamos, porque las cosas en el día a día no están nada fáciles. Decenas de comerciantes abren y cierran sus establecimientos comerciales sin hacer una sola venta en el día o sin ganar lo necesario para pagar el arriendo o pagar los servicios públicos. Y a propósito de servicios públicos estos (el aseo, por ejemplo) son tan costosos que algunos están trabajando solo para pagar las facturas de energía y recolección de basuras.  

Como si lo anterior fuera poco el desempleo tiene arrinconadas a las familias en donde no hay una fuente de ingreso estable para sostener los gastos del día a día y la inseguridad es tal que las mujeres ya no se atreven a salir con sus bolsos por el temor a que en cualquier calle aparezca alguien que se los arrebate.

En algunos barrios como Nueva Esperanza y Villa Luz, por ejemplo, sus moradores vieron no solo al helicóptero sino una descomunal movilización de miembros de las fuerzas armadas en patrullas, camiones y carros blindados. Los desprevenidos ciudadanos comentaban que tal vez se trataba del rescate de un secuestrado o de la búsqueda de algún delincuente de grandes ligas que se escondía en la zona. Finalmente se supo que se trataba de un operativo contra  el transporte informal de gasolina. Lo que no se explicaban era la magnitud de esta movilización de tropa, pues cada día los ciudadanos son testigos del paso de los vehículos transportadores por las calles de la ciudad y sus relaciones  digamos normales (ni malas ni buenas).

La parafernalia del helicóptero, las patrullas, las motos y los uniformes de varios colores me hicieron pensar que las aeronaves del Estado pudieran dedicarse también a sobrevolar las rancherías y los pueblos en busca de los niños que se mueren de física hambre y que al parecer no le importan a nadie.  

Necesitamos que los recursos públicos, en lugar de dedicarse a reprimir se usen para promover la vida y que así como se ha creado el ESMAD, un grupo especializado en golpear a los ciudadanos con bolillos y asfixiarlos con gases lacrimógenos cuando ejercen su derecho a la defensa, se creara el otro ESMAD, un Escuadrón Móvil Anti Desnutrición.  Y de esa manera los ciudadanos miraríamos hacia arriba y aplaudiríamos cada vez que aparezca sobre nuestro despejado cielo el ruidoso helicóptero que tanto nos ha angustiado en los últimos días.

Frase muy mencionada: ¿Por qué hay tantos recursos para la represión y tan pocos recursos para la infancia y la juventud?

contador de visitas

viernes, 20 de marzo de 2015

Colegio san José, cincuenta años.

Por: YIRA GONZÁLEZ  ESPINOSA
Profesional en lingüística y literatura de la U. de Cartagena.
Especialista en pedagogía y ética de la U. Juan de Castellanos.
Docente de la I.E.  # 4, sede San José


Un delicioso olor a champagne  perfuma el ambiente, una emotiva serenata con mariachis nos envuelve en la nostalgia y la alegría, una torta en medio de una mesa decorada con flores, durante la apertura de las bodas de oro  del colegio San José de Maicao,  trae a nuestra memoria la dulzura de agradables momentos en nuestro amado Colegio. Desde el 18 de marzo de 2015  y durante todo este año, los miembros de la comunidad educativa de esta institución, celebramos con júbilo su quincuagésimo aniversario.

Si, efectivamente han pasado cincuenta años desde la fundación de éste, el  primer colegio de bachillerato de Maicao. Sueño realizado de un grupo de hombres maicaeros que, preocupados por la inexistencia de un establecimiento en el que la juventud maicaera realizara sus estudios bachilleres  y aprovechando la presencia de misioneros del vaticano, convencen a uno de ellos para que les ayude en la consecución del  anhelado plantel educativo. 

Es así como amparado en el convenio de misiones del Vaticano se funda, en 1965 y por la ordenanza 012, el Colegio San José, así lo explica Julio Manuel Larios en su artículo “Por los Senderos de Nuestra Memoria”[1]. Como dato curioso, respecto a ese grupo de hombres maicaeros, cuentan que todos se llamaban “José” en honor al santo patrono de este territorio, y por ello el grupo se denominaba “los Josés”;  es lógico, entonces, pensar que el nombre del colegio es un  doble homenaje, a los gestores de su causa y por supuesto al santo patrono de Maicao.

Los festejos apenas comienzan. La madrugada del 18 de marzo, se realizó la alborada Joseísta con   una caravana de vehículos que, con música y la alegría de los docentes, anunció a Maicao el inicio de nuestra celebración. 

A las cinco de la tarde del mismo día, con su mejor gala, es decir su nuevo uniforme, los estudiantes desfilaron en peregrinación, con faroles y cánticos, desde el colegio hasta la iglesia San José, en el tradicional “Desfile de la luz”. Esta vez, no solo estuvieron acompañados  por sus docentes sino también por padres de familia y egresados, quienes con mucho entusiasmo se han unido a las festividades.

En las celebraciones joseístas del 19 de marzo, fecha de apertura de las bodas de oro, participaron  varios  invitados, entre ellos algunos medios de comunicación, personalidades del gobierno municipal  y el doctor  Alejandro Rutto, orgulloso egresado del colegio, quien en otras oportunidades ha contado, a las nuevas generaciones estudiantiles, como  hizo parte de un  grupo de diligentes egresados que luchó por conseguir  instalar la planta física del colegió san José en el espacio en el que hoy se encuentra.

Durante estos cincuenta años han sido muchos los  esfuerzos, y las glorias obtenidas por  estudiantes, directivos, docentes, padres de familia, egresados y otros,  por sacar siempre adelante la causa joseista. Hoy y  durante todo el año celebramos, pero no bajamos la guardia en la lucha por mejorar nuestras condiciones ambientales, fortalecer nuestra planta física y engrandecer  nuestro proyecto educativo.

La mañana del diecinueve de marzo se cerró felizmente con la intervención del conjunto vallenato de nuestros docentes “El ejemplo”, otro de nuestros orgullos; durante todo el año realizaremos eventos culturales académicos y deportivos porque el colegio San José sonríe mientras lucha formando con amor en valores, cultura y academia.




[1] Julio Larios. Por los senderos de nuestra memoria. REVISTA EXPRESION CULTURAL JOSEISTA. Primer volumen, marzo de 2010.
hit counter dreamweaver
hit counter dreamweaver

miércoles, 11 de marzo de 2015

El internet de Directv llegó a Maicao

   Maicao hace parte de las 58 poblaciones de Colombia en donde DIRECTV ofrecerá el servicio de Internet Fijo al Hogar en los próximos cinco años.

·         38 barrios de Maicao ya cuentan con el servicio de Internet de DIRECTV.

·         Al finalizar el 2015 la multinacional espera tener alrededor del 85,3% de la ciudad cubierta con el servicio de Internet.

·         16 mil hogares podrán tener el servicio de Internet de DIRECTV.

Maicao, marzo de 2015. DIRECTV, compañía de TV paga líder mundial en televisión digital y en entretenimiento, entró con su nuevo producto de Internet a Maicao en donde este año espera prestar el servicio a más de 16 mil hogares de los 19.057 que tiene la ciudad.

Como parte de su plan de expansión, la multinacional desplegará sus Red en 58 poblaciones de Colombia en los próximos cinco años. A la fecha, la compañía ya presta el servicio en 27 municipios y a fin de año espera cubrir 150 en todo el territorio nacional. El plan de negocio también incluye ciudades principales e intermedias como Barranquilla, Cali, Cúcuta, Manizales, Medellín, Villavicencio, Cartagena y Bucaramanga, entre otras.

A través de su nuevo producto, la compañía ofrecerá a los clientes que estén dentro de la zona de cobertura conexión fija al hogar de banda ancha con velocidades desde 1 mega hasta 6 megas, según las necesidades de cada cliente con variedad de paquetes desde la modalidad de prepago con recargas parciales hasta planes fijos mensuales o también tienen la opción de comprar televisión más Internet en un mismo paquete a precios competitivos.

Los usuarios, disfrutarán desde chatear, interactuar en redes sociales, enviar mails, reproducir videos hasta ver videos en streaming, tener videoconferencias, jugar en línea y conectar múltiples dispositivos al tiempo, según las megas que adquieran. 

”Escogimos a Maicao porque identificamos necesidades insatisfechas en el tema de telecomunicaciones. Actualmente la penetración de Internet en esta ciudad es del 2,84% cifra que queremos aumentar con la llegada de nuestro servicio de Internet, ya que esto genera desarrollo, oportunidades laborales,  entretenimiento,  conocimiento y una extensa y diversa información en línea”, afirmó Nicolás Botero, Gerente Regional de Ventas de DIRECTV, Colombia.

La cobertura de Internet  de DIRECTV en Maicao es del 85,3% A la fecha la multinacional ya presta el servicio en 38 barrios, entre los que se encuentran: Simón Mejía (E1) El Carmen (E2-E3) Centro (E2-E3) Loma Fresca (E2-E3)

La gran apuesta de DIRECTV es ofrecer el mejor servicio para sus usuarios basado en tres valores: confiabilidad, estabilidad y servicio acompañado de una tecnología de vanguardia junto a una atención única y personalizada.

Es así como la compañía tiene preparado continuar con su plan de negocio ofreciendo el mejor servicio de Internet Fijo al Hogar, proyectando para el final de 2015 llegar a más de 16 mil hogares de la región. 
free web hit counter
free web hit counter

Estudiantes de la sede San Martín motivados con el arte

Los estudiantes de los diferentes grados de la sede San Martín del colegio la Inmaculada, se motivaron hacer diferentes tipos de dibujos y poesías de toda clase y demostrando así que los más chicos también tiene gran talento. 

Esta actividad fue llevada por estudiantes de los grados superiores los cuales se encargaron de enseñarles a los estudiantes como mejorar sus técnicas. 

Luego de esto se dio un plazo para que los niños entregaran su obra. Hubo muchos de diversas formas, pero los que más resaltaron fueron los que tenían las dos en un trabajo, es decir un hermoso poema con un grandioso dibujo, a pesar de su corta edad muchos dominan diferentes técnicas y sus escritos son fantásticos. 

 Al final el premio es de todos, con esta actividad vemos que tenemos futuros poetas y futuros pintores y eso es precisamente lo que necesitamos porque vemos que la juventud de hoy poco le gusta esto y si seguimos pronto se extinguirán los pocos artistas y escritores que quedan,
por eso tenemos que motivarnos a llevar a cabo más actividades como esta y motivar a la juventud a que se interesen por el oficio.

viernes, 6 de marzo de 2015

Layda Magdaniel, la dama feliz y llena de vida que protege a los difuntos

Por: Alejandro Rutto Martínez

Cada vez que la señora Layda Magdaniel iba al cementerio San José de Maicao para visitar las tumbas de sus seres queridos  sentía el peso de la tristeza causada por la ausencia definitiva de su hijo Luis, de sus tíos Nicolás y Juana y de su señora madre, Remedios.

martes, 3 de marzo de 2015

Ernesto Rutto Piano, un corazón italiano que palpitó en Maicao

En la década de los años cincuenta Maicao era un pueblo que crecía de manera impetuosa: se abrían nuevos establecimientos comerciales,  se construía el parque principal y se producía un gran intercambio comercial con otros pueblos de Colombia y de Venezuela.  

También fue una época en que

sábado, 21 de febrero de 2015

Víctor Bravo en el festival Suena un Acordeón

Maicao-. Los organizadores del Festival Suena un Acordeón invitaron al periodista Alejandro Rutto Martínez como presentador para los actos inaugurales en la edición de 1986. Uno de los invitados especiales fue el poeta Víctor Bravo Medoza, quien deleitó a los asistentes con un recital de los poemas que recientemente había publicado en sus primeros libros. 

La fotografía muestra el entusiasmo con que fue recibida la intervención del literato guajiro. En ella están Alejandro Rutto, Juan Mendoza y Víctor Bravo Mendoza, entre otros. ¿Podría usted identificar a alguien más?
free invisible web counter
free invisible web counter

viernes, 20 de febrero de 2015

Momentos memorables: fútbol de segunda división en Maicao

El periodista Alejandro Rutto Martínez entrevista a al  brasilero Oton Alberto Dacunha, director técnico de Junior en la Segunda División (1.986)

Maicao-. En los años ochenta no existía el Torneo de la B. El segundo evento más importante del fútbol colombiano era la Segunda División, en la que los equipos guajiros Deportivo Maicao y Deportivo Riohacha participaban con gran éxito. Grandes equipos como Junior, Unión Magdalena, Millonarios e Independiente Santa Fe pisaron la cancha del estadio Hernando Urrea Acosta para disputar memorables encuentros con el equipo de la frontera. 

Uno de los cuadros más competitivos de la época era Junior de Barranquilla, cuadro que veía en este torneo un buen escenario para promover a sus jóvenes figuras. 

El director técnico de los "Tiburones" era el brasilero Oton Alberto Dacunha uno de los responsables de la cantera y quien formó talentosos jugadores de la talla de José María Passos y otras figuras. 

En el torneo de Segunda División el Deportivo Maicao alcanzó su mejor puesto en 1989, cuando se ubicó como subcampeón detrás de Independiente Santa Fe. 
counter
counter

La gran fiesta de la solidaridad con los estudiantes

En primer plano aparecen Víctor Choles Ortiz ("Chichi" Choles), "Nando" Iguarán Romero y Ernesto Acosta Solano

Maicao-. Una de las organizaciones juveniles más importantes que ha existido en la frontera es la

jueves, 19 de febrero de 2015

Periodismo de campo

Maicao-. En los momentos dorados del fútbol de esta ciudad el periodista Alejandro Rutto Martínez aprovecha una pausa en los entrenamientos para entrevistar al director técnico Manuel Jumbo Torres.

Es el año de 1.986 y el equipo de la frontera, como de costumbre, cumple una destacada campaña. free counter
free counter

Encuentro de Joseístas

Maicao-. En 1.986 los compañeros de la Quinta Promoción de bachilleres del Colegio San José de Maicao, se reunieron para recordar los momentos felices que pasaron juntos durante sus estudios e secundaria.

La velada se llevó a cabo en casa de Yolanda Guerra, madre de Arturo Román Guerra. En la foto aparecen Janeira Flórez, Mireya Paredes, Efraín Guerrero (QEPD), el profesor Albert Rodríguez (QEPD), "Santico" Carrillo, Arturo Román, Olson Martínez y Alejandro Rutto.

¿Puede usted identificarlos a todos? Te retamos a que lo hagas.

  hit counter dreamweaver
hit counter dreamweaver

Momento para recordar: rueda de prensa en Coldeportes

Un tiempo después de su designación como director regional de Coldeportes  Ignacio Escudero Fuentes convocó a una rueda de prensa para divulgar los primeros logros de su gestión.

El evento se realizó en la oficina de la Regional ubicada en el Edificio El Ejecutivo de Riohacha y en el mismo participaron los periodistas Albeiro Sánchez, Alejandro Rutto Martínez Y Jimmy Pizarro.

Momento Inolvidable. 
  hit counter
hit counter

miércoles, 18 de febrero de 2015

Momentos memorables de Maicao


Maicao-. El 7 de junio de 1.986 Radio Península y la Asociación de Estudiantes de la Universidad de La Guajira Residentes en Maicao, EUGREM, desarrollan una radiotón con el fin de recolectar fondos para la adquisición de un bus que transporte a los estudiantes en su ruta diaria en Maicao a Riohacha y viceversa.  La meta era obtener tres millones de pesos, y cando faltaban 10 minutos para las 12 de la noche, hora en que terminaría el evento, faltaban aún cien mil pesos para alcanzarla. 

Fue entonces cuando se presentó el ex alcalde Hernando Iguarán Romero y entregó la suma con la que se logró el objetivo de los estudiantes y de la cadena radial. 

En la histórica foto aparecen Víctor "Chichí" Choles, Hernando Iguarán Romero, Alejanoro Rutto Martínez, Ernesto Acosta Solano, Narcizo Martínez y Luis Octavio Cruz. 

Foto memorable de la historia maicaera de los años 80. 

web counter code
web counter code

martes, 18 de noviembre de 2014

Momento alucinante

Escribió: Ernesto Josías Rutto Ortega

Sábado en la mañana, sol radiante, día de playa, mar totalmente  azul y cristalino como un diamante. Mañana perfecta para estar con ella.

Pelo ondulado a la perfección, rostro inocente de niña que como rosas no necesita decoraciones para verse bella, ojos oscuros que si se observan con determinación se logra ver su increíble color café,  cuerpo delgado  de figura esbelta.


Recostado en sus piernas, viendo su inocente rostro y su pelo coposo, de fondo el sol radiante que la hace ver de forma angelical. Pedirle un beso en la mejilla y sentir sus delicados labios, al pedirle otro y con movimiento sucio y sutil para que se unan los suyos con los míos. Convirtiéndose este un momento alucinante. 
hidden hit counter
hidden hit counter

Palabras sentidas: homenaje al profesor Federico Barrios



Escrito por Alejandro Rutto Martínez 

Hace unos días nos tomó por sorpresa la repentina partida del profesor Faderico Barrios Del Río, un educador que, como los de su generación, dedicó sus mañanas, sus tardes y sus noches durante más de cuarenta años a formar y forjar las nuevas generaciones de maicaeros y maicaeras en varias instituciones, pero sobre todo en La Inmaculada y en la Escuela San Martín.

Federico Barrios combinó su espíritu amable, su apostolado en la educación y su amor al deporte para ganarse la simpatía de miles de estudiantes y padres de familia y de decenas de compañeros de profesión quienes lo apreciaban como miembro de sus respectivas familias.

Nació en Cartagena, la ciudad de los casi quinientos años de historia y allí vivió su infancia, entre el cariño de sus mayores, el apego a los estudios y la ilusión de cultivar en el presente lo que disfrutaría en el futuro. Por una feliz coincidencia fue alumno del profesor Sixto Amador, quien le enseñaría como hacerse amigo de los números, de las operaciones básicas y lo ayudó a transitar por primera vez por el enmarañado camino de las matemáticas, ciencia con la que luego se familiarizaría para hacerla su amiga e invitarla a hacer parte de su proyecto de vida.

Quiso Dios que unos años más tarde maestro y alumno se encontraran de nuevo en La Guajira y juntos vivieran de nuevo la aventura feliz del conocimiento y los acogería como sus ciudadanos adoptivos para que hicieran lo que mejor sabían hacer y esto era servirle a los demás mediante la eficaz utilización del viejo tablero verde, la inmaculada tiza blanca y la extensión creciente de sus múltiples conocimientos.

Federico Barrios, en un cálido día de la aurora de su existencia tomó una de sus decisiones trascendentales y fue la de cambiar el suelo cartageneras, humedecido por las vibrantes olas del Mar Caribe y cercado por murallas cuatro veces centenarias, para trasladarse a Maicao. Con esta escogencia se matriculó para siempre en el apostolado fecundo de la educación y se dedicó a propagar entre los habitantes de la frontera el evangelio ilimitado del conocimiento y los saberes.

De esta manera cambió la tranquilidad de la tierra propia por la incertidumbre de un pequeño pueblo adoptivo en el que se dedicaría a pegar los ladrillos del edificio de nuestra identidad. El profesor Federico cambió las murallas indestructibles por el barro invulnerable de los caminos guajiros; cambió los tambores lejanos y lastimeros que se escuchaban dese el legendario palenque, por el sonido armonioso y alegre de los acordeones guajiros; cambió las canchas bien cuidadas de su ciudad natal por los potreros de piedra y polvo en donde él y sus jugadores coleccionarían trofeos en los torneos municipales; cambiaría a los amigos de sus años iniciales por amigos, como Sol Martínez, de toda la vida, quienes a la larga serían para él una nueva familia.

En lo que sí no cambió nunca fue en el apego a los suyos y en la responsabilidad con sus hermanos y sus sobrinos, quienes siempre tuvieron en él a alguien que se esforzaría por brindarle lo mejor de su existencia con el fin de conducirlos al puerto seguro de la felicidad.

Con el profesor Federico Barrios aprendimos que la vida es como un viaje en barco en el que nos enfrentamos a los caprichosos movimientos del mar y a fuertes tormentas pero gracias a los amigos seguimos adelante. La gran personalidad de Federico Barrios, su condición de deportista, apasionado, de entrenador aplicado a la victoria y de educador de varias generaciones lo convirtió en  un gran experto en el arte de ganar amigos. 






frontpage hit counter
frontpage hit counter

viernes, 14 de noviembre de 2014

Electricaribe, la campeona de las protestas


Por: Hernán Baquero Bracho 

Electricaribe la peor empresa que presta los servicios públicos de energía en La Guajira y en toda la Región Caribe, se ha convertido en la campeona de las protestas de las comunidades guajiras y de la costa en general en diferentes puntos de su geografía. Cuando no es en Riohacha, es en Manaure, Dibulla, Uribia, Maicao, Barrancas, Distracción, San Juan del Cesar, La Jagua del Pilar y pare de contar por no contar con el fluido eléctrico por horas y por días en los corregimientos de los municipios señalados, pero municipios como Villanueva, El Molino, Urumita, Hatonuevo, tampoco se escapan a estos malos servicios que presta esta empresa española que como un jinete del apocalipsis vino como un anticipo del Armagedón de la humanidad en esta parte del planeta a generar el caos y la confusión entre todos sus habitantes.

En el espacio del noticiero de la verdad, de la emisora comunitaria Viva Fm de Villanueva, el excelente periodista y amigo de también mi casa periodística Aliskair de La Hoz Rodríguez, expresaba que si hubiera un record Guiness de protestas en el país, La Guajira se llevaría ese horroroso lugar por las protestas diarias de sus habitantes a través de las vías de hecho, por diferentes motivos, donde Electricaribe se lleva el primer lugar por todas estas protestas por la pésima calidad del servicio que presta, lo que la ha convertido en una empresa con el peor ranking en la mala calidad de vida que le entrega a La Guajira a través del fluido eléctrico y es verdad lo que expresaba Aliskair de La Hoz, el viernes 14 de noviembre del año en curso, en estos momentos nuestro departamento ocupa el primer lugar no con la mejor calidad de vida, no con la mejor calidad educativa, no como el departamento menos pobre, no como el departamento más transparente en todas las actuaciones públicas, no como el menos violento, no con las mejores vías, sino el primero en protestas de toda índole, lo que demuestra que ya los guajiros nos estamos cansando de tantos atropellos y tantos desafueros.

¿Qué hacer con Electricaribe? Ni los debates en el Congreso de la República, donde ellos brillaron por su ausencia, dándoles una cachetada sobre todo a la clase dirigente costeña y ante la indolencia de la otra clase dirigente del país que no los apoyaron en esta cruzada, la empresa española toma aires de grandeza y de burla hacia esta región del país, ni los columnistas que escribimos del tema les interesa un bledo, los análisis y los balances que hacemos a diario sobre los malos servicios que presta, sobre todo donde el calor infernal genera mala calidad de vida sino dispone de un buen servicio eléctrico la empresa Electricaribe y con las protestas que se dan a diario colocan paños de agua tibia, que al día siguiente se vuelven otra vez problemas recurrentes por la misma situación pero parece que ellos gozan de una manera maquiavélica con todas estas actuaciones desde los dirigentes más encopetados al simple ciudadano del común.

Parece ser que el gran problema del Gobierno Nacional es que no disponen de los recursos necesarios para terminar el Contrato de Condiciones Uniformes que se firmó con la empresa Electricaribe – Unión Fenosa: “El CCU es el acuerdo por el cual la empresa se compromete a prestar el servicio público domiciliario de energía según las condiciones pactadas. El contrato de servicios públicos debe ser uniforme, es decir, ofrecer las mismas condiciones (derechos y deberes) para la prestación del servicio a todos los habitantes de una región. Se denomina consensual porque se da por establecido el contrato sin que sus partes lo firmen, cuando el usuario solicita recibir o está recibiendo el servicio en el lugar donde habita o donde establece su negocio, siempre y cuando el inmueble cumpla con las condiciones técnicas previstas por la empresa. Las partes en el contrato, son la empresa de servicios públicos y el cliente, ambos son responsables de las obligaciones y deberes establecidos en el contrato e igualmente son beneficiarios de los derechos contenidos en el mismo. De acuerdo con la ley 142, los suscriptores y usuarios se comprometen en un Contrato de Condiciones Uniformes con la empresa prestadora del servicio, es decir, que ésta tiene que dar el mismo tratamiento a todos los usuarios por igual y como tal estos usuarios adquieren derechos pero también deberes que cumplir”.

El incumplimiento en el pago de una o más facturas y el uso no autorizado del servicio, acometidas, medidores o líneas por parte del usuario dan lugar a la suspensión o corte del servicio de energía, para restablecer el servicio, el cliente debe cancelar las sumas pendientes de pago, los gastos de conexión y las irregularidades. Lo anterior parece que quedó solamente en el papel, porque la superintendencia de servicios públicos es otra que ha acolitado los malos servicios de energía que presta Electricaribe.  

jueves, 13 de febrero de 2014

Jesús: el héroe de sus amigos


Por: Alejandro Rutto Martínez

Tomado de articulo.org

Jesús les dijo: -“Les aseguro que el que cree en mí también hará las obras que yo hago; y hará otras todavía más grande.”

Juan 14:12

Jesús tiene una apacible reunión con sus discípulos en una noche cualquiera en que la brisa fresca rosa el curtido rostro de aquellos galileos que han dedicado los últimos años a esparcir las buenas nuevas en toda la región.  Una vez terminada la cena Jesús se ciñe una toalla y pone agua en un lebrillo.  Un poco después está lavando los pies de sus discípulos. Que alguien lavara los pies a otra persona no era extraño pues se trataba de una costumbre de la época. Una costumbre al parecer en decadencia, pero con firmes raíces en la historia de un pueblo del desierto en el cual era normal que la fina arena se adhiriera a las sandalias y a las extremidades inferiores de los viajeros.  Lavar los pies era una muestra de humildad, de buena educación y de consideración por parte de los buenos anfitriones.

Jesús decide lavar los pies a sus discípulos en un gesto que tiene varias connotaciones:

Jesús se despoja de su investidura de líder y de maestro mediante la cual pudo haber ordenado a cualquiera de sus discípulos que se encargara de lavar los pies de todos sus compañeros y también a él mismo. Sin embargo, prefirió llevar a cabo él mismo aquel acto significativo en que no solo mojó los pies de sus hombres, sino que además se encargó de obtener él mismo el agua y de conseguir la toalla. Es decir, toda la liturgia y cada uno de las escenas de ese bello acto lo tuvo a él mismo como protagonista.
Jesús quiere conservar una tradición de alto contenido simbólico pues no se trata únicamente de dejar limpios los pies sino de ejemplificar la purificación interior de las personas para que éstas no solo tengan unos pies libres el sucio sino un alma libre de la contaminación del pecado.

Jesús no hace acepción de ninguna persona y por igual lava los pies de todos sus discípulos aunque sabe que  uno de ellos no pasará la prueba de fidelidad a su maestro y en su corazón y su mente ronda la idea de traicionarlo. Pero aún judas recibe de Jesús un trato bondadoso, igualitario y generoso.
Jesús reprende a Pedro, quien en un acto de humildad mezclado con su habitual rebeldía manifiesta que no permitirá que sus pies sean lavados.  No se opone a ser lavado pero le parece que no es merecedor de que alguien de tan alta jerarquía espiritual se incline ante él, se humille y le lave sus pies.  El Hijo del Hombre convence a Pedro con un argumento demoledor: “Si no te lavare, no tendrás parte conmigo”  Ante estas razones Pedro se apresura a pedir que le sean lavados los pies y de paso las manos y la cabeza.  Ahora el gesto de sumisión es del discípulo en relación a su maestro.

Jesús sabe que no todos los que están en ese lugar son limpios y lo dice con claridad: “y vosotros limpios estáis, aunque no todos”. ¿Quién le ha dado esa información? Jesús no se engaña y sabe que entre ellos hay alguien cuyo endurecido corazón no ha reverdecido con sus enseñanzas y su buen ejemplo. Los hechos demostrarían que uno de sus discípulos había naufragado ante el poder corruptor de las tentaciones, el dinero y la deslealtad.

Jesús ordena a sus discípulos (a los de aquel tiempo y a los de todos los tiempos) que se laven los pies los unos a los otros, es decir, los invita a ser solidarios, brindarse amistad y darse afecto.  La orden es en sí una invitación a considerar al otro como una parte vital de sí mismo y formar entre todos una familia unida en la fe y en las obras.

Jesús desea que sigamos su ejemplo y hagamos como él ha hecho. E el capítulo 13 versículo 15 del libro de Juan lo dice en unas sencilla pero muy profundas palabras: “Porque ejemplo os he dado, para que como yo os he hecho, vosotros también hagáis”.
Jesús el Maestro nos invita a la unión y a la comunión. Desde nuestro maravilloso estado de hombres libres, quienes hemos ganado nuestra libertad por un noble sacrificio suyo y por nuestra decisión de dedicarnos al servicio de nuestros semejantes.

Alejandro Rutto Martínez es un destacado escritor italo-colombiano que ha dedicado una buena parte de su vida a la enseñanzasobre temas de ética y liderazgo en congresos, seminarios y universidades. Es administrador de empresas egresado de la Universidad de La Guajira y especialista en Administración de programas de Desarrollo Social en la Universidad de Cartagena. Especialista en Orientación Educativa y Desarrollo Humano en la Universidad El Bosque y Especialista en Docencia Universitaria en la Universidad Santo Tomás. Actualmente cursa la maestría en Ciencias de la educación en un convenio entre la Universidad de Matanzas (Cuba) y la Universidad de La Guajira (Colombia). Es autor de seis libros y de numerosos artículos que se pueden leer en www.articulo.org y en su página www.maicaoaldia.blogspot.com. Puedes contactarlo a través del correo electrónico: alejandroruto@gmail.com o seguirlo en twitter: @Alejandrorutto
http://www.articulo.org/articulo/67869/jesus_el_heroe_de_sus_amigos.html#sthash.5EHib12Z.dpuf
contador de visitas web

jueves, 23 de enero de 2014

El extraño caso del hotel

Tomado de articulo.org

Autor: Alejandro Rutto Martínez

A las siete en punto de la noche, cuando introdujo la llave en la cerradura de la puerta, Ovidio presintió que algo raro iba a sucederle. Contuvo la respiración y giró su mano hacia la izquierda como le había enseñado el camarero del Hotel Granadino cuatro días antes cuando recién llegaba a la ciudad. Empujó suavemente la puerta, dio un paso hacia delante y observó preocupado y estupefacto el espectáculo que se mostraba ante sus ojos: el cuarto estaba... estaba casi vacío. La cama de un solo cuerpo, la nevera-bar, el televisor, la cómoda y la silla habían desaparecido junto con su equipaje, los libros y los periódicos.

En la pared más próxima al baño habían fijado un cuadro en el cual se apreciaba a un hombre de luengas barbas crucificado con la cabeza hacia abajo, lleno de sangre y con un horrible gesto que delataba los espantosos dolores sufridos durante su martirio. Miró hacia todas partes pero no pudo encontrar ningún rastro de los muebles ni de sus objetos personales.

Quiso entrar, para revisar el cuarto de baño con la esperanza de encontrar, al menos, la máquina de afeitar que le regalara su hijo Plinio y su cepillo de dientes, pero lo invadió de repente una sensación de temor y decidió salir lo más rápido que pudo hacia un lugar más seguro. Cuando se disponía a marcharse echó un último vistazo al cuadro. Sus medidas eran de dos metros de alto por uno veinte de ancho.

 El pintor había utilizado colores fuertes pero, sobre todo, el rojo y el anaranjado. El hombre de la imagen estaba envuelto en una sábana y fijado a dos gruesos maderos en forma de cruz por tres clavos exageradamente grandes. La sangre le corría de los pies hacia la cabeza y había salpicado los listones, el manto, la barba y el cabello de la víctima.

Algo en especial le llamó la atención y entonces su angustia fue mayor; cerró la puerta de prisa e hizo un esfuerzo para convencerse de que no era verdad lo que había visto en el último momento: Las gotas de sangre no solo salpicaban el rostro exangüe del crucificado; no solo manchaban su vestidura blanca, no solo se colaba por su barba y su cabello, sino que... salpicaba el piso de la habitación. ¿El piso de la habitación?

No. No era cierto porque la sangre, el cuadro, el hombre muerto y todo lo demás era ficción; producto de la creatividad de algún artista y él, Ovidio Manuel González Iglesia, a sus 58 años, ya estaba muy crecido para andar creyendo en vainas. Caminó presurosamente hacia la escalera por la cual bajaría a la recepción para averiguar por los muebles y por sus pertenencias.

Cuando había recorrido un metro sintió cierto gemido a sus espaldas. ¿Un gemido? No. Tal vez fue un animal. En el tercer piso se alojaba un matrimonio y al niño de éstos le había visto un perrito pekinés en horas de la mañana. Sí, eso era; no había de que preocuparse. Continuó su camino, pero volvió a escuchar un quejido lastimero proveniente de la garganta, ¡no! Del alma de alguien que sufre. Ahora si estaba seguro. No era el ladrido de un pekinés ni el quejido de otro animal. Era el grito apagado de un ser humano al borde de la muerte. Una expresión lastimera, humana y absolutamente sincera de alguien que sufre.

 ¿Qué haría ahora? ¿Continuaría su camino y olvidaría aquel sonido de otro humano quejándose por el dolor? ¿Se quedaría allí esperando un nuevo rastro de la misteriosa voz moribunda? No debió esperar mucho para escuchar de nuevo aquel grito desesperado. La voz lastimera esta en alguna parte, cerca del sitio que él ocupaba ahora en el pasillo. Para ser más exacto, el llamado angustioso provenía ¡Bendito sea Dios! Provenía de la habitación 301 su propia habitación...

 ¿Y qué iba a hacer ahora en ese pasillo largo, solitario y libre de todo rastro humano proveniente de la habitación que él mismo ocupara y cuya llave tenía aún consigo? ¿Huirá despavorido sin saber exactamente de que huía? ¿O se devolvería para enfrentarse de una vez por todas con el misterio y también con el peligro?

 Vio su reloj. Habían transcurrido solo tres minutos desde cuando abandonó el cuarto. Tres largos minutos en los que la tierra había continuado su perenne recorrido alrededor del amo de los astros, pero él seguía ahí petrificado, como le sucedía en las noches lejanas de la infancia cuando sus hermanos mayores y el novio de su hermana se dedicaban a contar cuentos horrorosos e interminables de muertos que regresaban de la tumba; de voces que salían de ninguna parte; de gritos que se sentían en donde no había nadie; de pasos presurosos cuyos dueños nunca fueron vistos; de gritos de vaqueros conduciendo una bulliciosa manada de vacas sin que nadie pudiera ver nunca los animales ni a quienes los guiaban; de ruidos extraños en habitaciones desocupadas; de sombras extrañas....

 En fin... se sintió acobardado como en aquellas noches en las cuales, después de escuchar a los adultos y sus historias macabras durante dos o tres horas, lo único que lo tranquilizaba era meterse en medio de papá y mamá a pesar de las protestas y los regaños de sus viejos. Tan viejos en aquel entonces como lo era él en este día y a esta hora en que el horror se alojaba en cada una de sus células, sin saber si correr en dirección opuesta al peligro o enfrentarlo de una vez por todas sin importa cual fuera el precio de tal acción a la cual algunos llamaban intrepidez pero él había llamado siempre falta de prudencia.

 Sin saber cuándo ni porqué tomó de pronto una decisión. Sacando valor de alguna parte, se devolvió, llegó de nuevo ante la puerta, la abrió sin dubitaciones ni arrepentimientos tardíos para encontrarse con el espectáculo pavoroso (horror) de la miseria humana plasmada en aquel cuadro de tonalidades diversas en que el anaranjado de la tarde conversaba sin afanes con el amarillo del desierto y juntos elaboraban una sintonía de matices inigualables para hacerle una venia al rojo intenso de la sangre derramada en la humanidad exánime de aquel hombre moribundo o muerto, quien pudo haber sido un abuelo feliz de la tierra del sol; o un patriarca sabio del Oriente recóndito; o un pastor de ovejas en la llanura inmensa de la cual hablaban sus hermanos cuando no estaban sumidos en el espeluznante juego de contar historias de finados inconformes y de almas en penas; o un apóstol de los doce que acompañaron al Mesías. El que era y ahí estaba en el lienzo de un pintor desconocido.

 La habitación estaba sola y vacía, salvo por la presencia de ese cuadro de belleza seductora y misteriosa. De ese lugar no podía proceder el gemido de un ser humano; por lo menos no el gemido de un ser de carne y hueso. Paseó la vista por las cuatro paredes de la habitación y no encontró huellas que delataran a alguien que hubiera gemido. Su mirada se detuvo de repente en algo a lo que antes no le había prestado atención; la puerta entre abierta del cuarto de baño.

¿A acaso él no la había visto cerrada cuando entró a la habitación, unos minutos antes? Si, la puerta estaba cerrada, no le cabía la menor duda. Pero ahora estaba ahí, abierta a medias, como retándolo burlonamente para que continuara su minucioso registro. ¿Quién la abriría? Se preguntaba. Esa era una noche de sucesos inexplicables; cuadros insinuantes; gemidos acongojadores; soledades infinitamente desoladas; pasillos interminables; colores descollantes, recuerdos espeluznantes....

Y ahora... como si faltara algo, una puerta abierta cuando la lógica de la ciencia y la racionalidad de lo pragmático indicaban que debería estar cerrada como él la había dejado un rato antes. ¿En verdad estaba cerrada esa puerta? Eso era lo que él creía pero no podía confiar en su memoria miedosa en un momento como aquel, en que hubiera querido correr de nuevo hacia el pasado, atravesar la antesala del recuerdo; despejarse de la valentía fingida y meterse de una vez por toda en la cama de sus padres aunque éstos lo regañaban por su cobardía precoz.

 Pero ya no podía actuar así. La infancia estaba a cincuenta años de distancia y sus viejos deberían estar reunidos a esta hora con el resto de sus mayores en algún lugar del más allá de donde solo regresaban muy de vez en cuando para aparecérsele en los sueños estremecidos de sus malas noches o en las historias recurrentes de su hermano mayor Rafael, a quien las borracheras cada vez más frecuentes, le daba por contar la vida y obra de sus padres desde que el viejo Egidio llegó en barco desde más allá del mar hasta la noche en que mama Juana cerró sus ojos mientras rezaba una oración para que su nieto Iván no volviera a convulsionar.

Oyó un nuevo ruido que lo obligó a salir bruscamente de su viaje al mundo del ayer. Una ráfaga de viento había movido las cortinas de las ventanas. Volvió a mirar hacia la puerta del baño y ésta seguía a medio cerrar. ¿Quién la había abierto? Él no lo sabía, pero... si estaba abierta era porque alguien más había estado en ese lugar. En ese caso ¿Quién?

No había ninguna respuesta. En un momento de lucidez extrema o de locura irremediable él no podía distinguir bien de qué estado mental se trataba, caminó hacia el baño, empujó la puerta hasta abrirla totalmente y se dispuso a entrar. ¿A entrar? Aún estaba a tiempo de devolverse y de abandonar de una vez por todas aquel maldito lugar. ¿Irse? ¿Y quedarse por siempre con la curiosidad de saber que había adentro? No, no quería ser perseguido por la incógnita. Así que se tragó su miedo, sacó un poco de valor quién sabe de dónde y entró al baño.

Allí, en aquel lugar... vio lo que sospechaba ¡Nada! Ese sitio estaba vacío por completo. Ni siquiera su máquina de afeitar, ni su cepillo de dientes. En un rincón, cerca de la puesta pudo divisar un pequeño frasco con pintura roja y dentro de éste un pincel cuyo mango estaba manchado del mismo color. Regresó a la habitación y de ésta al pasillo; escucho por última vez el quejido lastimero proveniente de algún lugar del edificio, pero no se devolvió.

Tenía la decisión de bajar a recepción a preguntar por sus cosas. Llegó a la escalera, descendió rápidamente y, cuando por fin estuvo frente a la recepcionista, le preguntó sin demoras: -Señorita, soy huésped de la habitación 301. Al regresar no he encontrado mi equipaje ni mis objetos personales - ¿Es usted pintor?- No señorita no soy pintor- Un momento... profesión... pintor. Es lo que aquí.- Si, pero yo no soy pintor y hasta hace unas horas ocupaba esa habitación.- ¿Y usted dice que estuvo alojado aquí hasta hace unas horas?- Si señorita. Y aún tengo en mi poder la llave de mi habitación. La 301- Espere un momento, caballero. La recepcionista hizo varias llamadas.

Ovidio esperó impaciente aquellos minutos. Según el reloj de su desesperación transcurrieron como treinta años. Según el reloj de la pared no habían pasado más de cinco minutos. - Don Ovidio, mi compañera me informa de un pequeño cambio. Sus cosas han sido trasladadas a la habitación 201. La 301 se la hemos arrendado a un artista que por cada año visita la ciudad por estos días y siempre pide el mismo cuarto. Pensamos que usted no se molestaría.

En todo caso le ofrecemos nuestras disculpas y le obsequiamos este bono para que consuma lo que desee en el bar, por cuenta de la casa.- Ovidio hizo un gesto de comprensión, entregó la llave y recibió la que le ofrecían, junto con una tarjeta color azul. Caminó sin prisa hacia su nuevo cuarto, introdujo la llave en la cerradura, empujó la puerta y se encontró ante una cama limpia y ordenada; en el rincón una mesa y sobre la mesa la caja con sus libros. Todo estaba en orden. Todo menos sus ideas.

Por eso no pudo dormir bien esa noche. A la mañana siguiente empacó la ropa, sus periódicos viejos, los libros de segunda comprados a buen precio en la librería "MARKOS" y cuatro discos de Alfredo Gutiérrez, los cuales había comprado en un remante de música de antaño. Pago la cuenta en el hotel, tomó un taxi hasta el Terminal, compró el tiquete de regreso a su pueblo, pasó por el puesto de revista en donde adquirió un ejemplar del "Diario el Atlántico" y se dirigió al puesto que más le gustaba: en la mitad del bus, ventanilla de la derecha.

 Dos minutos antes de que el vehículo iniciara su marcha abrió el periódico y leyó el titular de grandes letras rojas: "El extraño caso del Hotel" la nota era extensa y en el centro de ella figuraba una foto a todo color: un cuadro en donde un hombre crucificado, con la cabeza hacia bajo, hacia esfuerzos por aferrarse a la vida.

 AUTOR: Alejandro Rutto Martínez

Se autoriza la reproducción por cualquier medio siempre y cuando se cite la página y el nombre del autor. 

viernes, 10 de enero de 2014

El libro que hace una radiografía de la Guajira


"La Guajira, Realidad mágica" es uno de los documentos que mejor dibuja la vida del departamento de La Guajira a través de las diferentes etapas de su historia. Costa de una sucesión de crónicas en las que el autor narra hábilmente varios de las más importantes facetas del acontecer en la Península, entre ellos sus bonanzas desde las perlas hasta el carbón, el sufrimiento de la etnia wayüu, el potencial turístico de la región, los rituales de vida, el exótico comercio de Maicao, la música de acordeón...en fin, son 21 historias que su autor, el periodista y escritor Pepe Palacio ha recogido de su vasto arsenal literario para entregarlo en este bello libro que va por su tercera edición. 

La tercera edición ha tenido el apoyo de la alcaldía municipal de Riohacha y por la secretaría de educación y permitirá que las nuevas generaciones de estudiantes tengan a mano una obra en la que de manera permanente podrán consultar buena parte de la historia de los últimos tres siglos de la región.  “La Guajira, realidad mágica” será un medio para que los jóvenes y los niños se conozcan un poco más a su tierra y de ésta manera aumente su amor por ella. 

En el decir de Rafael Ceballos, alcalde municipal de Riohacha, es ese el propósito de haber apoyado a Pepe Palacio para que la tercera edición de su libro se convirtiera en una realidad tangible. Además, hace parte de la intención del Gobierno municipal de impulsar el gusto por la lectura, para lo cual se ha iniciado la construcción del Plan Institucional de Lectura Escritura y Oralidad en las escuelas y colegios y se ha construido una hermosa Biblioteca en la Comuna 10,  la más popular de la ciudad.

Pero volvamos a las páginas del libro que nos ocupa y digamos que al leerlo uno encuentra buena literatura como ocurre en las líneas dedicadas a la fundación de Maicao en la crónica titulada “Maicao, exótico emporio comercial”. Además de su importancia histórica el escrito matiza la crónica con pinceladas de poesía como ocurre en éste fragmento: “Todo comenzó cuando un día de aquel año llegó (Manuel) Palacio López con su familia y se detuvo en esa zona arenosa y seca. Miró hacia el norte de la península y su vista se perdió en la inmensidad y llanura del desierto y luego la volvió a su derecha y divisó el horizonte venezolano. Aún montado en su caballo, exhaló un suspiro y, sin pensarlo dos veces, en una decisión visionaria y como queriéndole poner punto final a su trashumancia gitana descargó los animales y pro cedió a construir aquella primera choza…”

El libro adquiere un mayor tono de realismo mágico en uno de sus capítulos finales titulado  “La cantera del realismo mágico” en el que hace un estudio detallado de la relación íntima, estrecha y tangible de Gabriel García Márquez con todo el departamento de La Guajira y de manera especial con su capital Riohacha, la tierra en donde fue engendrado en la casa situada en una calle del centro. ¿Quiénes habitamos hoy en día en La Guajira? Pepe Palacio nos tiene la respuesta: “Hombres y mujeres con idénticas características a los personajes que brillan con luz propia  en las novelas y cuentos de Gabriel García Márquez, deambulan por el norte y el sur del departamento de La Guajira”


Un buen plan para hoy o para mañana o para una de estas tibias tardes aireadas por la brisa generosa y refrescante, es colgar la hamaca entre un árbol de mango y otro de níspero y dedicarse a gozar con desasosiego de las páginas placenteras de “La Guajira, realidad Mágica”. 


hit counter html code
hit counter html code

Analytic