Escrito por: Kaled Rutto Martínez
Cuando buscas explicar
aquello que no puedes entender, algo que duro menos que el adiós de tu silencio
haciéndome creer que estuviste ahí siendo tú, y no era más que el reflejo
invisible de tu piel presente en mi inconsciente que tuvo vida con tus palabras
y murió con tus actos.
Que puedo explicar si tú
eras lo que yo nunca fui y siempre soñé, tu voz alimentaba cada una de mis
fantasías olvidando la realidad, porque fuiste la palabra correcta de lo que
pensé que era amor, porque curabas mi miedo cuando había una duda, necesitando
una mirada haciéndome ver el disfraz de tu alma.
No entiendo como un
suspiro hizo de un todo la nada, un espejismo que me hizo creer la verdad que
nuca fuiste, si eras una niña mientras yo crecí como hombre, pensé que la
inocencia no les ganaría a los años, pero veo que es el tiempo quien declara
las huellas y te deja la enseñanza.
Has de ti un vuelo si
descanso, donde las árboles sean más que tu habitación en cada noche, las
montañas no solo estén para cegar tu camino si no para alentar tu inconsolable
sed de soledad, y te haga ver que el viento por más que vueles, lo sientas,
pero no lo veas, estará en ti, impulsando tus ganas de libertad hasta que
descubra tu verdadera desnudez.