Por: ELKIN DE ARMAS PEREZ
Ingeniero Industrial
Recientemente leí un escrito del Profesor Ramiro Choles Andrade donde hace una radiografía de la situación actual del Municipio de Maicao. Totalmente acertado con la realidad que vivimos, pero que desafortunadamente muchos no asimilan o callan porque tienen intereses particulares con el gobernante municipal o departamental de turno.
Es una realidad que todos sentimos de manera unilateral, y se acentúa cuando en otras ciudades califican a Maicao como un municipio en retroceso y sin ningún tipo de planificación. Nos duele cuando ofenden a nuestro municipio, pero en el fondo sabemos que todos hemos sido testigos cómplices que presente tantas falencias en su desarrollo.
Durante la bonanza de Maicao todos sus habitantes dependían casi en su totalidad de la actividad comercial, al punto que a nadie le importaba cómo se llamaba el Alcalde o los secretarios de despacho. Con la devaluación del bolívar y la crisis comercial que se vive, uno de los negocios mas rentables es financiar campañas políticas o apoyar al candidato X o Y para luego obtener jugosas ganancias, aplicando la ley del serrucho y la picada, generando como consecuencia lo que cita el Profesor Choles en su escrito: pobres resultados, problemáticas de todo orden, crisis, atraso, subdesarrollo, improvisaciones, negligencias, lo cual empobrece irremediablemente a los pueblos.
Es una gran verdad que muchos se niegan a aceptar, pero la comunidad debe despertar y quitarse la venda de los ojos, entendiendo que el desarrollo de los pueblos depende de su actitud frente al mismo y no de la posición de dos grupos politiqueros que se disputan el ponqué burocrático y presupuestal para beneficios particulares.
Duele decirlo, pero si todo sigue igual y no reaccionamos, en un futuro no muy lejano nos convertiremos en corregimiento del Municipio de Albania, a cuya dirigencia felicito porque han invertido eficientemente las regalías que en un tiempo tuvimos y que no supimos aprovechar.
Soy conciente que estas palabras no caen bien a algunas personas, pero cuando se está ausente es cuando uno mas se convence de lo permisivo e indiferente que hemos sido los maicaeros y por eso reitero que el desarrollo depende de nosotros mismos y la solución colectiva está en la misma comunidad que con su propio esfuerzo jalone el desarrollo, tal como la actitud asumida por los moradores del Barrio El Carmen, que se cansaron de las promesas electorales y con su propio esfuerzo señalizaron las principales vías, contribuyendo a disminuir el índice de accidentalidad.
En las actuales circunstancias alguien debe liderar el desarrollo del Municipio y por eso planteo que se despolitice a la Universidad de La Guajira, para que sea la academia quien tome las riendas.
Profesor Choles, lo felicito por su posición vertical y espero que todos quienes tuvimos la fortuna de ser sus alumnos hayamos aprendido esta nueva lección escrita por Usted y despertemos ante tanta mediocridad reinante. Maicao merece mucho más.
Ingeniero Industrial
Recientemente leí un escrito del Profesor Ramiro Choles Andrade donde hace una radiografía de la situación actual del Municipio de Maicao. Totalmente acertado con la realidad que vivimos, pero que desafortunadamente muchos no asimilan o callan porque tienen intereses particulares con el gobernante municipal o departamental de turno.
Es una realidad que todos sentimos de manera unilateral, y se acentúa cuando en otras ciudades califican a Maicao como un municipio en retroceso y sin ningún tipo de planificación. Nos duele cuando ofenden a nuestro municipio, pero en el fondo sabemos que todos hemos sido testigos cómplices que presente tantas falencias en su desarrollo.
Durante la bonanza de Maicao todos sus habitantes dependían casi en su totalidad de la actividad comercial, al punto que a nadie le importaba cómo se llamaba el Alcalde o los secretarios de despacho. Con la devaluación del bolívar y la crisis comercial que se vive, uno de los negocios mas rentables es financiar campañas políticas o apoyar al candidato X o Y para luego obtener jugosas ganancias, aplicando la ley del serrucho y la picada, generando como consecuencia lo que cita el Profesor Choles en su escrito: pobres resultados, problemáticas de todo orden, crisis, atraso, subdesarrollo, improvisaciones, negligencias, lo cual empobrece irremediablemente a los pueblos.
Es una gran verdad que muchos se niegan a aceptar, pero la comunidad debe despertar y quitarse la venda de los ojos, entendiendo que el desarrollo de los pueblos depende de su actitud frente al mismo y no de la posición de dos grupos politiqueros que se disputan el ponqué burocrático y presupuestal para beneficios particulares.
Duele decirlo, pero si todo sigue igual y no reaccionamos, en un futuro no muy lejano nos convertiremos en corregimiento del Municipio de Albania, a cuya dirigencia felicito porque han invertido eficientemente las regalías que en un tiempo tuvimos y que no supimos aprovechar.
Soy conciente que estas palabras no caen bien a algunas personas, pero cuando se está ausente es cuando uno mas se convence de lo permisivo e indiferente que hemos sido los maicaeros y por eso reitero que el desarrollo depende de nosotros mismos y la solución colectiva está en la misma comunidad que con su propio esfuerzo jalone el desarrollo, tal como la actitud asumida por los moradores del Barrio El Carmen, que se cansaron de las promesas electorales y con su propio esfuerzo señalizaron las principales vías, contribuyendo a disminuir el índice de accidentalidad.
En las actuales circunstancias alguien debe liderar el desarrollo del Municipio y por eso planteo que se despolitice a la Universidad de La Guajira, para que sea la academia quien tome las riendas.
Profesor Choles, lo felicito por su posición vertical y espero que todos quienes tuvimos la fortuna de ser sus alumnos hayamos aprendido esta nueva lección escrita por Usted y despertemos ante tanta mediocridad reinante. Maicao merece mucho más.
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