La semana pasada prometía ser de absoluta tranquilidad en Maicao y, de no ser por los temores de que la crisis diplomaticas entre Colombia y Venezuela generara un alza en los precios de gasolina y otros productos, pudiera decirse que todo se desenvolvía en la rutina propia de una ciudada dedicada a l desarrollo de su cotidianidad.
Sin embargo, el vierenes se conoció la noticia que tanto se había esperado durante los últimos meses y ésta causó un verdadero terremoto político e la más importante frontera de la Costa Norte Colombiana: el Consejo de Estado había tomado la decisión de dejar sin efecto la elección de Ovidio Mejía Marlanda y, en consecuencia, ordenar la realización de nuevas elecciones para escoger un nuevo mandatario.
El hecho tiene varias aristas y e convierte, por ahora, en el suceso del año en Maicao. En primer lugar es bueno decir que por segundo período consecutivo los estrados judiciales (o los órganos de vigilancia y control) dejan a Maicao sin su mandatario constitucionalmente elegido. Recordemos que en el año 2.005 la Procuraduría General de la Nació destituyó al alcalde José Rafael Díaz y ordenó la convocatoria a nuevas elecciones en las cuales el voto popular favoreció a Daissy Lorena Hernández.
Por otra parte la decisión del alto tribunal se convierte en el principIO del fin de una larga batalla jurídica librada por Ovidio Mejía Marulanda y su equipo de asesores desde el mes de agosto del 2.007 cuando se inscribió como candidato a la alcaldía para participar en las elecciones de ese mismo año. Al momento de inscribirse el ex alcalde estaba cobijado por una suspensión de la procuraduría la cual llegaría a su término trece días después, es decir, más de dos meses antes de las elecciones. Desde el momento mismo de la inscripción comenzaron las dudas jurídicas pues el aspirante estaba inhabilitado al inscribirse pero no el día de las elecciones y tampoco al momento de posesionarse.
Hubo varias hipótesis sobre lo que sucedería en adelante: se dijo que no se le contarían los votos el día de las elecciones; que, en caso de obtener el mayor número de votos no se le entregaría la credencial; que no podría posesionarse; que no podría gobernar. El último domingo del año 2.007 Ovidio Mejía Marulanda ganó las elecciones y, prácticamente ese mismo día se inició su batalla para ejercer el cargo que sus conciudadanos le habían otorgado mediante el voto popula. Y una a una fue ganando varias batallas: sus votos fueron contados, su credencial le fue entregada y su posesión se llevó a cabo ante dos testigos. Pese a todas las oscuras predicciones en su contra Ovidio Mejía comenzaba a gobernar como alcalde de Maicao.
Sin embargo, unos meses después, exactamente en junio del 2.008, el Consejo de Estado decidió suspenderlo del cargo y desde entonces se ha mantenido al frente de la administración el alcalde designado Jarlen Garrido, quien fue escogido por el gobernador Jorge Pérez de una terna enviada por Alianza Social Indígena, el movimiento que avalara la candidatura del cuestionado mandatario.
De acuerdo con este fallo del Consejo de Estado en un período de tres meses debe haber nuevas elecciones en Maicao y desde ya se sabe que van a medir fuerzas tres movimientos cuya presencia fue muy importante en el año 2.007: el grupo Compromiso Serio de Ovidio Mejía Marulanda: el movimiento "Pulido y Decidido" del ex concejal Eurípides Pulido y "Marca la Diferencia" de Daissy Hernández e Fernández. De los tres sectores el único que tiene claridad sobre el nombre de su aspirante es "Pulido y Decidido" quien presentará el nombre de su máximo líder. En los próximos días, o tal vez horas, se conocerán los aspirantes por las demás fuerzas y tal vez alguna candidatura suprapartidista e independiente que tanto bien le haría a la política local.
Sin embargo, el vierenes se conoció la noticia que tanto se había esperado durante los últimos meses y ésta causó un verdadero terremoto político e la más importante frontera de la Costa Norte Colombiana: el Consejo de Estado había tomado la decisión de dejar sin efecto la elección de Ovidio Mejía Marlanda y, en consecuencia, ordenar la realización de nuevas elecciones para escoger un nuevo mandatario.
El hecho tiene varias aristas y e convierte, por ahora, en el suceso del año en Maicao. En primer lugar es bueno decir que por segundo período consecutivo los estrados judiciales (o los órganos de vigilancia y control) dejan a Maicao sin su mandatario constitucionalmente elegido. Recordemos que en el año 2.005 la Procuraduría General de la Nació destituyó al alcalde José Rafael Díaz y ordenó la convocatoria a nuevas elecciones en las cuales el voto popular favoreció a Daissy Lorena Hernández.
Por otra parte la decisión del alto tribunal se convierte en el principIO del fin de una larga batalla jurídica librada por Ovidio Mejía Marulanda y su equipo de asesores desde el mes de agosto del 2.007 cuando se inscribió como candidato a la alcaldía para participar en las elecciones de ese mismo año. Al momento de inscribirse el ex alcalde estaba cobijado por una suspensión de la procuraduría la cual llegaría a su término trece días después, es decir, más de dos meses antes de las elecciones. Desde el momento mismo de la inscripción comenzaron las dudas jurídicas pues el aspirante estaba inhabilitado al inscribirse pero no el día de las elecciones y tampoco al momento de posesionarse.
Hubo varias hipótesis sobre lo que sucedería en adelante: se dijo que no se le contarían los votos el día de las elecciones; que, en caso de obtener el mayor número de votos no se le entregaría la credencial; que no podría posesionarse; que no podría gobernar. El último domingo del año 2.007 Ovidio Mejía Marulanda ganó las elecciones y, prácticamente ese mismo día se inició su batalla para ejercer el cargo que sus conciudadanos le habían otorgado mediante el voto popula. Y una a una fue ganando varias batallas: sus votos fueron contados, su credencial le fue entregada y su posesión se llevó a cabo ante dos testigos. Pese a todas las oscuras predicciones en su contra Ovidio Mejía comenzaba a gobernar como alcalde de Maicao.
Sin embargo, unos meses después, exactamente en junio del 2.008, el Consejo de Estado decidió suspenderlo del cargo y desde entonces se ha mantenido al frente de la administración el alcalde designado Jarlen Garrido, quien fue escogido por el gobernador Jorge Pérez de una terna enviada por Alianza Social Indígena, el movimiento que avalara la candidatura del cuestionado mandatario.
De acuerdo con este fallo del Consejo de Estado en un período de tres meses debe haber nuevas elecciones en Maicao y desde ya se sabe que van a medir fuerzas tres movimientos cuya presencia fue muy importante en el año 2.007: el grupo Compromiso Serio de Ovidio Mejía Marulanda: el movimiento "Pulido y Decidido" del ex concejal Eurípides Pulido y "Marca la Diferencia" de Daissy Hernández e Fernández. De los tres sectores el único que tiene claridad sobre el nombre de su aspirante es "Pulido y Decidido" quien presentará el nombre de su máximo líder. En los próximos días, o tal vez horas, se conocerán los aspirantes por las demás fuerzas y tal vez alguna candidatura suprapartidista e independiente que tanto bien le haría a la política local.
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Lo cierto del caso es que Maicao va a marcar un récord poco envidiable y es el de tener la mayor cantidad de alcaldes en un período constitucional, pues por el momento ha enido cuatro mandatarios (Ovidio Mejía, Juan Mendoza, Orlando Mejía y Jarlen Garrido) y a éstos habrá que sumar el nombre de quien sea el ganador de las próximas elecciones políticas. La falta de gobernabilidad es evidente en Maicao. Y sus consecuencias también.
Lo cierto del caso es que Maicao va a marcar un récord poco envidiable y es el de tener la mayor cantidad de alcaldes en un período constitucional, pues por el momento ha enido cuatro mandatarios (Ovidio Mejía, Juan Mendoza, Orlando Mejía y Jarlen Garrido) y a éstos habrá que sumar el nombre de quien sea el ganador de las próximas elecciones políticas. La falta de gobernabilidad es evidente en Maicao. Y sus consecuencias también.
