Por: Enrique Herrera Barros.
A raíz del comentario hecho en este espacio hace algunos días sobre lo que está sucediendo con los mangles en la Bahía de Portete, el nuevo director de CORPOGUAJIRA el Dr. Arcesio Romero ha tenido la gentileza de invitarme a sus oficinas, con el fin de que el grupo que está manejando el plan que se está llevando a cabo y que tiene el nombre de “Diagnostico de los Ecosistemas de La Guajira” y que encabeza la Dra. Gregoria Fonseca Lindao.
En una amena charla que duró algo así como tres horas y media me fui enterando de los estudios y diagramas que tiene esta institución, con el fin mas que todo de corregir anomalías creadas por la naturaleza misma y por el hombre, el mas depredador de los animales terrestres, y de cuales son las prioridades a acometer a futuro.
Me reuní con el grupo que maneja ese tema, ayudado por elementos audiovisuales que enriquecen sobremanera la explicación de los expertos ambientales, este grupo lo conforman entre otros la Dra. Gregoria Fonseca, el Dr. Manuel Manjarres, y el Dr. José David Rosado a quien todos conocemos como polaco.
Revisamos los trabajos de campo que se han hecho desde Palomino hasta la Bahía de Tucacas en Puerto López pasando por los manglares y humedales de la zona costera de La Guajira.
Prioriza Corpoguajira dos manglares a salvar, los de Portete, y la Laguna Salá de Riohacha, de la cual hace parte el entorno del Río Ranchería y su delta, incluyendo el Riíto, elemento clave para la reforestación de la laguna, nos extendimos en su problemática, por ser este un monumento nacional, huérfano de padre y madre y de padrinos, pero que a Corpoguajira le preocupa y que al parecer no ha tenido acompañamiento de los otros entes que tienen que ver con el manejo del Medio Ambiente.
Pero tengo que confesar que he salido con una preocupación inmensa, por el hecho de que instituciones como la Alcaldía estén trabajando como rueda suelta, pues tienen un proyecto espectacular que al escuchar a la Dra. Hilda Lubo la Sria. de Planeación municipal, entendí que lo están haciendo solos, pero que creo que no está aterrizado, con el debido plan de manejo de esta cuenca humedal, porque no hay siquiera límites de lo que será la laguna en si.
Se me ocurre pedir y rogar, que se constituya un ente interdisciplinario entre la Gobernación del departamento, la Alcaldía de Riohacha, y Corpoguajira para que se analicen con calma y sesudamente los lineamientos trazados por todos y cada uno de ellos y se les busque un Norte común a estas acciones, para que estos esfuerzos dispersos, vaciados en un solo tomo, en blanco y negro, nos ayuden a salvar la Laguna Salá, pulmón de Riohacha y monumento histórico de la patria.
Aquí hay mucha gente a la que hay que congregar alrededor de este tema, entre ellos a la Academia de Historia, porque yo pretendo creer que cuando se drague la Laguna, de ahí saldrá el museo de Padilla, por la cantidad de corotos, llámense mosquetes, pistolas, arcabuces, yelmos, cascos, y quien sabe que mas habrá ahí donde se libró la famosa batalla.
Así mismo espero que suceda con Portete, donde deben converger Cerrejón, la Alcaldía de Uribia, la Gobernación, los dueños de Puerto Nuevo, y Corpoguajira.
Bien vale la pena desempolvar los proyectos de Ley que se quedaron en la boca del horno cuando Wilder Guerra Curvelo fue senador y que tienen mucho que ver con este tema que hoy trato. Por eso esta parte se la dejo a nuestros flamantes parlamentarios.
En próximos días estaremos visitando la bahía de Portete, para volver a mirar in situ no solo su mágica belleza, si no saber como están los caimanes agujas, pues tengo conocimiento de que la fundación Cerrejón los está protegiendo, y de los cuales tienen ochenta y cinco huevos en incubación.
Ojalá que no nos vallan a poner a interactuar con las famosas ONGs que vienen y se van y al parecer no son, si no misa de cuerpo presente.
Los tres mosqueteros, Chichi, Jaider y Arcesio si se unen, sacan adelante estos proyectos.
Aun no se cuando será la visita a la Bahía de Portete.
Animo.
Una sonrisa amable y permanente unida a su gran eficiencia es la característica de la bella recepcionista del Hotel La Hormiga de Santa Marta, Adriana Lucía Barrios, quien por demás es un ejemplo de superación pues no ahorra ningún esfuerzo para combinar sus exigentes turnos de trabajo con sus estudios de Contaduría pública en la Universidad Abierta y a Distancia.
