Por: Hernán Baquero Bracho
Haciendo un balance del ejercicio de la planeación participativa, nos encontramos frente a aciertos y desaciertos, estos ligados coincidencialmente a la no correspondencia entre lo planeado y lo ejecutado, es decir, el plan de desarrollo y los presupuestos municipales. El presupuesto municipal es la oportunidad de convertir en realidad lo planeado.
En este escenario y en aras de adoptar actitudes positivas, se sugiere a un año ya de finalizar su periodo de administración municipal, prepararse para hacer realidad lo planeado, a través de su participación activa en los espacios de elaboración del presupuesto municipal y recordando las máximas que hay que tener en cuenta en un presupuesto municipal.
El periodo en el que ha de aprobarse el presupuesto municipal esta reflejado en la Ley 136 de 1994 que establece la sesiones de los Concejos en los Municipios, categoría especial, primero y segunda, sesionarán ordinariamente desde el primero de octubre al 30 de noviembre y en los municipios, clasificados en las demás categorías, sesionarán ordinariamente en noviembre, con el objetivo prioritario de estudiar, aprobar o improbar el presupuesto municipal.
También es importante identificar mediante un análisis participativo los programas y proyectos propuestos en el plan de desarrollo que no se hayan implementado y los proyectos inscritos en el Banco de Proyectos hasta el momento, para que con estos insumos se prioricen las inversiones a partir del año 2008 para el periodo que esta por finalizar y para el periodo 2011 que está por terminar, tal como lo establece el sistema general de participaciones (Ley 715 de 2001), en donde se definen para educación, salud, agua potable y saneamiento básico, la cultura, deporte, medio ambiente, servicios públicos, vivienda, empleo, restaurantes escolares y fortalecimiento institucional, entre otros, los recursos a que tienen derechos los municipios.
Ha de recordarse que la Ley de Regalías aunque esta va ser transformada a través del acto legislativo 013 de 2010 y que entrará en vigencia la reforma constitucional a partir del año 2012, fortalece también los sectores de agua potable, saneamiento básico y medio ambiente, recursos estos que pueden favorecer la ejecución de programas y proyectos con estos fines que sean el resultado de procesos de participación.
No debemos olvidar la obligación que tienen los entes territoriales para con la implementación de la Ley 617 de 2000, “Ajuste Fiscal”, la cual obliga a sanear las finanzas, queriendo decir con lo anterior, en palabras de la gente, que a partir del 2004 los municipios no deben tener deudas que no se puedan pagar con sus recursos, de ahí la implementación de la Ley 550 en la cual se acogieron muchos municipios en el país.
En el escenario del trabajo con la administración municipal, en el entendido que es ella la encargada de elaborar, presentar y modificar el presupuesto municipal, es importante ratificar la asignación de los recursos económicos, para el apoyo logístico y administrativo a los consejos territoriales de planeación, como lo consagra la Ley 152/94 (Articulo 35) y la Ley 136/94 (Articulo 91), que define como función la de “facilitar la participación ciudadana” cosa que no se hace en la práctica, al igual que la Ley 715/01 (Articulo 76) que establece como sector de inversión con recursos de propósito general, el desarrollo comunitario, promoviendo mecanismos de participación comunitaria a través de convocatorias, reuniones y capacitaciones, lo que nos indica que debemos prepararnos para que de igual forma en el presupuesto de 2011 se tenga en cuenta el rubro presupuestal, fortalecimiento de la planeación participativa, a través del cual los consejos de planeación y las organizaciones sociales tendrán los recursos para el desarrollo de su trabajo.
Recordemos que entre otras acciones para implementar lo planeado en el próximo año tenemos las trochas ciudadanas locales y departamentales para elegir los nuevos alcaldes y gobernadores, al igual que el seguimiento y evaluación participativo al plan de desarrollo, acciones estas que requieren un trabajo intenso en participación, que buscan incidir en el fortalecimiento de las organizaciones sociales y la consolidación de lo público, en el escenario de la construcción de desarrollo de la gente, por la gente y con la gente. En estos campos La Guajira presenta una gran debilidad, ya que la participación ciudadana no se ve por ningún lado
Haciendo un balance del ejercicio de la planeación participativa, nos encontramos frente a aciertos y desaciertos, estos ligados coincidencialmente a la no correspondencia entre lo planeado y lo ejecutado, es decir, el plan de desarrollo y los presupuestos municipales. El presupuesto municipal es la oportunidad de convertir en realidad lo planeado.
En este escenario y en aras de adoptar actitudes positivas, se sugiere a un año ya de finalizar su periodo de administración municipal, prepararse para hacer realidad lo planeado, a través de su participación activa en los espacios de elaboración del presupuesto municipal y recordando las máximas que hay que tener en cuenta en un presupuesto municipal.
El periodo en el que ha de aprobarse el presupuesto municipal esta reflejado en la Ley 136 de 1994 que establece la sesiones de los Concejos en los Municipios, categoría especial, primero y segunda, sesionarán ordinariamente desde el primero de octubre al 30 de noviembre y en los municipios, clasificados en las demás categorías, sesionarán ordinariamente en noviembre, con el objetivo prioritario de estudiar, aprobar o improbar el presupuesto municipal.
También es importante identificar mediante un análisis participativo los programas y proyectos propuestos en el plan de desarrollo que no se hayan implementado y los proyectos inscritos en el Banco de Proyectos hasta el momento, para que con estos insumos se prioricen las inversiones a partir del año 2008 para el periodo que esta por finalizar y para el periodo 2011 que está por terminar, tal como lo establece el sistema general de participaciones (Ley 715 de 2001), en donde se definen para educación, salud, agua potable y saneamiento básico, la cultura, deporte, medio ambiente, servicios públicos, vivienda, empleo, restaurantes escolares y fortalecimiento institucional, entre otros, los recursos a que tienen derechos los municipios.
Ha de recordarse que la Ley de Regalías aunque esta va ser transformada a través del acto legislativo 013 de 2010 y que entrará en vigencia la reforma constitucional a partir del año 2012, fortalece también los sectores de agua potable, saneamiento básico y medio ambiente, recursos estos que pueden favorecer la ejecución de programas y proyectos con estos fines que sean el resultado de procesos de participación.
No debemos olvidar la obligación que tienen los entes territoriales para con la implementación de la Ley 617 de 2000, “Ajuste Fiscal”, la cual obliga a sanear las finanzas, queriendo decir con lo anterior, en palabras de la gente, que a partir del 2004 los municipios no deben tener deudas que no se puedan pagar con sus recursos, de ahí la implementación de la Ley 550 en la cual se acogieron muchos municipios en el país.
En el escenario del trabajo con la administración municipal, en el entendido que es ella la encargada de elaborar, presentar y modificar el presupuesto municipal, es importante ratificar la asignación de los recursos económicos, para el apoyo logístico y administrativo a los consejos territoriales de planeación, como lo consagra la Ley 152/94 (Articulo 35) y la Ley 136/94 (Articulo 91), que define como función la de “facilitar la participación ciudadana” cosa que no se hace en la práctica, al igual que la Ley 715/01 (Articulo 76) que establece como sector de inversión con recursos de propósito general, el desarrollo comunitario, promoviendo mecanismos de participación comunitaria a través de convocatorias, reuniones y capacitaciones, lo que nos indica que debemos prepararnos para que de igual forma en el presupuesto de 2011 se tenga en cuenta el rubro presupuestal, fortalecimiento de la planeación participativa, a través del cual los consejos de planeación y las organizaciones sociales tendrán los recursos para el desarrollo de su trabajo.
Recordemos que entre otras acciones para implementar lo planeado en el próximo año tenemos las trochas ciudadanas locales y departamentales para elegir los nuevos alcaldes y gobernadores, al igual que el seguimiento y evaluación participativo al plan de desarrollo, acciones estas que requieren un trabajo intenso en participación, que buscan incidir en el fortalecimiento de las organizaciones sociales y la consolidación de lo público, en el escenario de la construcción de desarrollo de la gente, por la gente y con la gente. En estos campos La Guajira presenta una gran debilidad, ya que la participación ciudadana no se ve por ningún lado