Fuente:Diario del Norte
Sin ninguna solución inmediata, concluyó el debate a la empresa Aguas de la Península, donde se analizaron los problemas de agua que padece la ciudad de Maicao, dado que todo quedó para ser estudiado o analizado por la gerente Marta Lucía Palacio Peña y la junta directiva de la entidad prestadora de servicios.
Aguas de la Península estuvo representada por Andrés Sáenz Ortiz, segundo subgerente, quien fue claro en decir que “no hay agua para suministrarle a Maicao y la ciudad está a la espera del caudal ecológico, o sea vamos a pedirle a Dios que nos mande el agua para nosotros poder tratarla y dársela al Municipio”.
El funcionario indicó que “el principal problema de Maicao es la falta de fuente hídrica, Maicao necesita 350 litros y hoy estamos recibiendo 85, que nos alcanza para prestar servicio sectorizado, lo cual es permitido por la ley; pero no le vamos a cobrar a quienes se demuestre que no les está llegando agua y les vamos a descontar los últimos cuatro meses de consumo, pero no el cargo básico, porque la ley no lo permite”.
Sáenz Ortiz señaló que se están haciendo unos cobros prejurídicos a quienes deben más de 13 meses, “si la carta dice que es cobro jurídico, vamos a evaluarlo y consultar con nuestros abogados, para si es necesario, corregirlo.
El concejal Yoel Plata propuso que se definiera de una vez por todas suspender el cobro jurídico y se solucionen los problemas a los usuarios, a lo cual el funcionario se negó, porque eso es objeto de estudio por parte de la gerente y la junta directiva, respuesta que causó tremendo disgusto entre los asistentes al punto que las barras y varios concejales se retiraron del recinto, “esa comisión no tiene poder de decisión, hemos perdido 4 horas hablando nada aquí”, gritaba Blanchar, al momento que se retiraba junto a otros concejales que rompió el quórum decisorio.
Cabe señalar que los concejales, la semana pasada, suspendieron el mismo debate por la ausencia de la gerente de la empresa, pero ayer después de tanta pataleta, escucharon a “los segundones que delegó la gerente”, al parecer, sin poder de decisión.