Escrito por: Kaled Rutto Martínez
Los misterios de la vida llevan tu nombre deletreado
en cada consonante y tienen por principio mis labios,
guardando uno a uno los secretos de los besos con la
misma fuerza del silencio, cuando las miradas son las únicas palabras que le
roban el aliento al alma. por eso querida mía,
estoy distraído ante la poesía que toca tu boca
y resbala en
mis manos para poder escribirte con cada palabra un verso de amor
y seas tú quien le de vida entre tantos sueños,
porque ninguna realidad vale la pena, sin la pena de
tu amor,
sería como escoger la lluvia, como la distancia que
marca nuestros caminos,
propios y
ajenos, del misterio que causa la libertad cuando hacemos lo que tenemos, y
queremos lo que tenemos, acostumbrados a ese misterio de ser feliz,
entre todas las
verdades más aceptadas no hay juicio que fuera de la lucidez anhele no ser
feliz.
Amor mío, me encanta la cordura de tus palabras, la
razón de tu sonrisa es una prolongación intensa de tus pensamientos, me encanta
tu rebeldía, tanto que has idealizado tu propio mundo, donde no hay entrada ni
salida,
es paradójico esto, aquel que logre estar, es porque
estuvo, es decir, una proyección alter ego de ti y eso lo amo, como si
yaciéramos una conversación de siempre, siendo tú en mí y yo en ti.