Tomado de EL INFORMADOR
Un desalojo que se presentó la mañana de ayer por parte de la jefe del grupo de inspectores de Policía, Rita Helena Cades Dekon, provocó un serio enfrentamiento entre la fuerza pública y los invasores.
El proceso comenzó muy temprano, la comunidad afectada quiso bloquear la Troncal del Caribe por inmediaciones del barrio Villa de Campo Alegre. Los uniformados debieron usar gases lacrimógenos para dispersarlos y restablecer el flujo vehicular por la mencionada carretera.
Las tierras son 5 hectáreas, las cuales están siendo reclamadas por el abogado Henny Márquez, en representación de una empresa constructora de la ciudad, denominada Ávila Ltda, cuyo predio había sido tomado por los invasores desde el año anterior.
En la diligencia judicial se destruyeron 80 casas construidas en barro y tablas, en donde habitan unas 310 familias, que en su mayoría son desplazadas de la violencia, quienes han venido de otras partes de la Región Caribe.
En el enfrentamiento con la fuerza pública, cuatro personas fueron detenidas; sin embargo, solo Eric Casimiro Miranda Suárez, fue judicializado por el delito de asonada, situación que debe aclarar ante el Fiscal y el Juez, cuando lo llamen a audiencia.
La comunidad denunció un presunto exceso de parte de los miembros de la Policía Nacional a la hora de realizar el desalojo. A varias personas, entre ellas mujeres, se les observó piedras en las manos al parecer para defenderse de la desproporción de los uniformados.
Al ciudadano Juan Carlos Redondo Rivadeneira, al parecer le pegaron con objeto contundente en la frente, ya que presenta una herida "Se me acercó un persona de civil, me tumbó, después me agarraron todos y me golpearon con el bolillo".
Los familiares se disponían ir al hospital y después a colocar la denuncia a la Defensoría del Pueblo. En ese mismo sentido, otras personas dijeron trasladarse a colocar la situación en conocimiento de las autoridades competentes.
Una vecina del sector que se identificó como Antolina Mindiola, dijo que le violaron los derechos, porque la Policía se había metido a su predio sin su autorización y sin ser invasora. "Al nieto me lo maltrataron, entraron a la casa de mi hija y le iban a echar gases lacrimógeno. Nosotros no somos invasores, tengo 35 años de habitar aquí y nunca había recibido atropello".
Un desalojo que se presentó la mañana de ayer por parte de la jefe del grupo de inspectores de Policía, Rita Helena Cades Dekon, provocó un serio enfrentamiento entre la fuerza pública y los invasores.
El proceso comenzó muy temprano, la comunidad afectada quiso bloquear la Troncal del Caribe por inmediaciones del barrio Villa de Campo Alegre. Los uniformados debieron usar gases lacrimógenos para dispersarlos y restablecer el flujo vehicular por la mencionada carretera.
Las tierras son 5 hectáreas, las cuales están siendo reclamadas por el abogado Henny Márquez, en representación de una empresa constructora de la ciudad, denominada Ávila Ltda, cuyo predio había sido tomado por los invasores desde el año anterior.
En la diligencia judicial se destruyeron 80 casas construidas en barro y tablas, en donde habitan unas 310 familias, que en su mayoría son desplazadas de la violencia, quienes han venido de otras partes de la Región Caribe.
En el enfrentamiento con la fuerza pública, cuatro personas fueron detenidas; sin embargo, solo Eric Casimiro Miranda Suárez, fue judicializado por el delito de asonada, situación que debe aclarar ante el Fiscal y el Juez, cuando lo llamen a audiencia.
La comunidad denunció un presunto exceso de parte de los miembros de la Policía Nacional a la hora de realizar el desalojo. A varias personas, entre ellas mujeres, se les observó piedras en las manos al parecer para defenderse de la desproporción de los uniformados.
Al ciudadano Juan Carlos Redondo Rivadeneira, al parecer le pegaron con objeto contundente en la frente, ya que presenta una herida "Se me acercó un persona de civil, me tumbó, después me agarraron todos y me golpearon con el bolillo".
Los familiares se disponían ir al hospital y después a colocar la denuncia a la Defensoría del Pueblo. En ese mismo sentido, otras personas dijeron trasladarse a colocar la situación en conocimiento de las autoridades competentes.
Una vecina del sector que se identificó como Antolina Mindiola, dijo que le violaron los derechos, porque la Policía se había metido a su predio sin su autorización y sin ser invasora. "Al nieto me lo maltrataron, entraron a la casa de mi hija y le iban a echar gases lacrimógeno. Nosotros no somos invasores, tengo 35 años de habitar aquí y nunca había recibido atropello".
Este artículo no detalla DONDE fue este suceso.En cualquier manualcito de periodismo le enseñan las interrogantes a que debe responder una noticia.
ResponderEliminarPor favor,más atención.