Barack Obama y John Mccain: De frente a un quiebre histórico

Escrito por: Alejandro Rutto Martínez

José Ortega y Gasset: "Cuidado de la democracia. como norma política parece cosa buena. pero de la democracia del pensamiento y del gesto, la democracia del corazón y la costumbre es el más peligroso morbo que puede padecer una sociedad".

Sí, apasionante porque marcará un quiebre histórico cualquiera que sea su resultado pues la nación más poderosa del mundo (aún lo es) tendrá por primera vez un presidente negro o una mujer en la vicepresidencia.

Y el hecho, obviamente, no será menor en un país en donde por muy largos años los negros fueron despreciados, discriminados, burlados y, en una época de mayor tolerancia, aceptados en oficios específicos relacionados con el espectáculo, como los deportes o la actuación.

Las mujeres también debieron dar su propia lucha y les costó tiempo y trabajo pasar de la cocina y el lavadero a posiciones anteriormente destinadas a los varones.

El país creció con un concepto según el cual la mujer debía ser amada y protegida. Y ella, a su vez, tenía la obligación de amar y proteger a su familia, para lo cual no era necesario que saliera de casa.

Especialmente no era necesario que saliera del la cocina y el lavadero. Pero los tiempos cambiaron y hoy las damas mandan en la cámara, y están al frente de posiciones tan importantes como el Departamento de Estado y la gobernación de estados tan importantes de Alaska. Precisamente desde ese territorio, vecino del Polo Norte y separado de Asia por el estrecho de Bering, procede la Sarah Palin, quien ayudaría a cambiar la historia al convertirse en la primera Sarah, la primera Palin y la primera mujer en desempeñar tan importante posición.

¿Qué sería más sorprendente? ¿La presidencia de un afro descendiente directo? ¿O la vice presidencia de una dama?Como están las cosas hoy la sorpresa sería que el senador John McCain logre prolongar de ocho a doce años la estadía del partido Republicano en la Casa Blanca. Realmente es heroica la batalla que el senador de Arizona ha podido dar si se tiene en cuenta la herencia política recibida de parte del presidente al que aspira a suceder.

La crisis económica, la misma cuyo golpe se siente por igual en todos los bolsillos, es solo uno de los muchos factores que en este momento juega en su contra y de qué manera.

Tal vez de no ser por este punto los electores habrían perdonado otros puntos no menos importantes pero un poco más lejanos de la cotidianidad del ciudadano: la dolorosa, costosa e inútil guerra ( ¿cuál guerra no es inútil?) de Irak; el enfriamiento de las relaciones con Rusia, hecho que hace recordar los tiempos angustiosos de la Guerra Fría; el resurgir del sentimiento anti norteamericano en varios países, en donde incluso se eligieron gobiernos de una ideología bien distinta a la del Tío Sam.

En fin, se trata de una agenda complicada a la que algunos le agregan incluso la avanzada edad del candidato lo cual no debería ser un factor decisivo en otra cultura pero sí en una sociedad acostumbrada a rendirle culto a la juventud y a la belleza. Según las encuestas, no la de ayer ni la de hoy, sino la mayoría de ellas, el senador Obama lleva una ventaja cada vez más sólida y estable.

Y, de no presentarse un suceso extraordinario que rompa con la tendencia, se convertirá en el presidente número cuarenta y cuatro de la nación de Washington y Jefferson.

Si así ocurre, la historia habrá comenzado a cambiar. Y jamás podrá verse a los negros de la misma forma en que se les vio por años.